ECONOMÍA CIRCULAR/ENTREVISTA 27 A nivel práctico, dados los acuerdos de colaboración que, por ejemplo, hemos firmado con la Federación Española de la Recuperación y el Reciclaje (FER) y con la Asociación de Empresas Gestoras de Residuos y Recursos Especiales (Asegre), en IMPLICA somos plenamente conscientes de las mayores trabas que padece el sector reciclador, que son los costes administrativos y las cargas burocráticas derivadas del cumplimiento normativo, más hoy en día donde se están implementando continuamente normativas sobre gestión de residuos que obliga a una adaptación permanente a las empresas. Por eso, desde IMPLICA vamos a reducir esa carga administrativa y a simplificar los trámites, lo que supondrá sin duda un gran beneficio económico para las empresas adheridas. Y, por supuesto, adquirir la ventaja competitiva de ser una compañía de referencia para sus clientes, ya que cumplirán con la legislación presente y la RAP. ¿Qué impacto tiene la calidad del SCRAP en el proceso de reciclaje de envases? Sin lugar a dudas, la trayectoria de más de 25 años como expertos en reutilización dan un valor añadido a un SCRAP como IMPLICA. Esto, unido a una correcta definición de las ETMRs (especificaciones técnicas de los materiales) y las buenas prácticas en la producción de residuos, asegura una mejora en el proceso de reciclaje. ¿Qué papel juegan en los SCRAPs los tradicionales recicladores? Este tipo de sistemas de responsabilidad ampliada, ¿pone en riesgo su papel o lo refuerza? ¿Serán los SCRAPS un acicate para profesionalizar el sector? Nuestros principales valores son la transparencia, la experiencia y el mantenimiento de la gestión actual de los envases. Y en nuestros principios fundacionales está el respeto de la gestión existente, por lo que nada tienen que temer los tradicionales recicladores porque lo que hacemos en IMPLICA es revisar el flujo actual de los envases y adaptarlo a la nueva legislación, manteniendo la cadena empresarial y de reciclaje. Por tanto, las empresas recicladoras deben tener claro que estamos aquí para ayudar, para contribuir a acelerar la economía circular, pero sin perder de vista que ellos son los auténticos protagonistas de ese nuevo modelo de desarrollo sostenible, al convertir los residuos en recursos, que es la piedra angular de la economía circular. El SCRAP contribuirá a mejorar esta gestión gracias a la implantación de las buenas prácticas en la producción de residuos que se traducirá en una mejor calidad del residuo y en un mayor reciclaje. En relación a si ayudaremos a la profesionalización del sector, la industria del reciclaje es actualmente un sector altamente profesionalizado, con personal muy cualificado y en continua formación sobre nuevas tecnologías y uso de maquinaria avanzada. En lo que sí podemos ayudar en esa pesada tarea administrativa que, como señalaba anteriormente, es una de las mayores preocupaciones de las empresas recicladoras. Ahí pondremos toda nuestra experiencia y a un equipo profesional que ayude a las empresas a reducir y a simplificar esa carga administrativa para que ellas puedan dedicarse a lo que mejor saben: convertir residuos en recursos. En distintos foros y eventos se habla de la necesidad de fomentar la colaboración entre los distintos SCRAPs. ¿Es factible establecer esa colaboración? Por supuesto que estamos abiertos a colaborar con otros SCRAP si con ello contribuimos al objetivo que marca la legislación. De hecho, desde IMPLICA ya hemos realizado alrededor de 30 webinarios con nuevas empresas envasadoras, poseedores finales, gestores y con asociaciones sectoriales de envasadores. “Las empresas recicladoras deben tener claro que estamos aquí para ayudar, para contribuir a acelerar la economía circular, pero sin perder de vista que ellos son los auténticos protagonistas de ese nuevo modelo de desarrollo sostenible”, señala Laura Sanz de Siria.
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