F73 - Ferretería y bricolaje

EMPRESAS FAMILIARES 56 De crisis económicas y empresas familiares En este artículo hablaremos de la crisis económica que tanto está afectando a las empresas de nuestro país, tanto a las familiares como a las no familiares. Sin embargo, nos centraremos en el afán de superación de los negocios familiares, para muchos de los cuales esta pandemia ha sacado a la luz su capacidad de resiliencia y recuperación, de consensuar soluciones y de afrontar con visión compartida los cambios económicos y sociales que han ido sucediendo. Ricard Agustín, fundador de Family Business Solutions y consultor de empresas familiares Todos somos conscientes de que la pandemia ha dejado una cicatriz importante en el tejido empresa- rial, especialmente en las empresas familiares demenor tamaño o de deter- minados sectores, como el ocio, la restauración o el turismo, que lo han tenido más difícil para sobreponerse a las severas y prolongadas restric- ciones y confinamientos impuestos por las autoridades para hacer frente al coronavirus. En marzo de 2020 la llegada del coronavirus supuso un choque abrupto y sin precedentes en la economía, cuyos efectos han ido perlongándose en el tiempo y, por ahora, hay pocas expectativas de recuperar la plena normalidad en el corto plazo. Dicho esto, también es cierto que durante este último año y medio hemos visto la capacidad de adap- tación de muchas empresas familiares que, obligadas por la situación y las sucesivas medidas sanitarias, han ido sorteando los obstáculos para poder mantener, en la medida de lo posible, su actividad económica y el empleo. La fortaleza de estas compañías procede de las características inherentes a las familias empresarias: el compromiso, la confianza, el esfuerzo, la rapidez en la toma de decisiones, la visión a largo plazo, la voluntad de continuidad para transmitir el negocio a la siguiente generación… Todas estas particulari- dades son muy valiosas en tiempos difíciles. Y no nos referimos solo a la situación causada por la COVID-19, sino a las crisis económicas en general. Las empresas familiares suelen resistir- las mejor que otros tipos de negocio, tanto a nivel de impacto, como en lo referente a la destrucción de puestos de trabajo. Lo que nosotros hemos constatado es que la mayoría de las familias empre- sarias con las que trabajamos han intentado mantener sus planes de inversión y, en la medida de lo posi- ble, también el empleo, y todo ello a pesar de que muchas han estado afectadas por ERTE y/o han padecido problemas de liquidez. Y no es solo nuestra percepción. Si nos fijamos en los datos, el 93% de las empresas familiares encuestadas este año para un estudio de KPMG han afirmado que han podido mantener el empleo durante la pandemia, a pesar de las difíciles circunstancias. El papel de las empresas familiares en la recuperación económica, social y laboral en lo que queda de 2021, en 2022 y, probablemente, en 2023 será crucial. Estas compañías son el principal motor de emprendimiento, creación de empleo y generación de beneficios en nuestro país. Y es que no podemos pasar por alto que en España hay aproximadamente 1,1 millones de empresas familiares que ocupan a 6,58 millones de personas, según los últi- mos datos aportados por el Instituto de la Empresa Familiar indican. El papel de las empresas familiares en la recuperación económica, social y laboral en lo que queda de 2021, en 2022 y, probablemente, en 2023 será crucial

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