DISTRIBUCIÓN 57 Utilizando IA, las empresas pueden analizar estos datos y ser capaces de detectar rápidamente anomalías, confirmar la autenticidad del producto y, al mismo tiempo, cumplir con los requisitos reglamentarios Los cobots están hechos a medida para formar parte de la mano de obra, mientras que los robots no son capaces de una automatización completa. Estos robots pueden cargar o descargar equipos pesados, así como ensamblar productos, o realizar operaciones de emparejamiento utilizando trabajadores humanos que se dedican principalmente a tareas más complejas y de valor añadido. Los cobots cuentan con sensores de visión basados en IA que les permiten autoajustarse a diferentes entornos y colaborar realmente con los humanos. Los sistemas de sensores de seguridad con Inteligencia Artificial se están integrando en las operaciones de la cadena de suministro para supervisar las condiciones en las que trabajan los empleados y determinar si existe algún peligro real o potencial. Las cámaras y sensores de seguridad funcionan con Inteligencia Artificial, por lo que son capaces de identificar cualquier comportamiento inseguro o condiciones ambientales que puedan causar peligro y tomar las medidas necesarias, como alertar a los trabajadores o emprender acciones automatizadas para detener los accidentes. De este modo, las empresas pueden ofrecer condiciones de trabajo seguras y minimizar los riesgos de lesiones en el lugar de trabajo. EL FUTURO DE LA CADENA DE SUMINISTRO CON LA AUTOMATIZACIÓN Y LA IA La revolución en la gestión de la cadena de suministro estará muy influenciada por los avances generalizados en materia de automatización, así como por las tecnologías de IA que la acompañan. Serán los mayores cambios en los próximos años: El concepto de hiperautomatización, que es la coexistencia de la IA, la automatización robótica de procesos (RPA) y el aprendizaje automático, se ha convertido en el principal activo de las cadenas de suministro de las empresas, haciéndoles realidad el «cero contacto humano». Estas soluciones permitirán a las empresas adaptarse a unas condiciones de mercado en constante cambio y ampliar sus operaciones, respectivamente. La visión final para el futuro es una red de suministro completamente autónoma que utilice IA. Estos sistemas serán tan inteligentes que podrán configurarse, curarse y gobernarse por sí mismos, por lo que no habrá necesidad de supervisión manual. Las cadenas de suministro autónomas serán adaptables y podrán informar de los programas de producción basándose en el número de pedidos pendientes, la producción en curso, la ocupación de los almacenes, así como la demanda. De la misma manera, encontrarán automáticamente los requisitos para quedar fuera del negocio. La IA es la herramienta de oro que hay que aplicar para transformar las cadenas de suministro en cadenas más sostenibles mediante métodos como la optimización del uso de los recursos, la reducción de los residuos y la disminución de las emisiones de efecto invernadero. La IA contribuyó a las simulaciones que ayudarían a desarrollar productos más ecológicos de transporte, reutilización y reciclaje, reduciendo las emisiones netas de carbono a lo largo de toda la cadena de suministro. n
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