5 Editorial El consumo sigue sin despegar En el mundo de la construcción, los áridos juegan un papel fundamental. Sin embargo, su consumo ha experimentado una caída del 2,1% en 2022, a pesar de que el año pasado la producción de la construcción registró un crecimiento del 4,2%. Los años 2006 y 2007 fueron históricos para esta industria, alcanzando cifras récord en subsectores asociados como la construcción de viviendas, la inversión pública, la producción de asfalto o las ventas de maquinaria. La gran crisis que vendría en los años siguientes dejó todos estos indicadores en mínimos, cuya recuperación ha sido lenta y progresiva en los años siguientes. El consumo de áridos naturales también alcanzó su máximo histórico en el año 2006, con 486 millones de toneladas, y sufriría también el impacto de la crisis desplomándose hasta los 112 millones de toneladas en 2014. El consumo registrado en 2022 continúa a un tercio del nivel máximo previo a la crisis, con lo que la recuperación del sector se antoja incompleta. La disminución en el consumo de áridos obedece a diversos factores. Uno de ellos podría ser el cambio en las tendencias de construcción, donde se ha visto un aumento en el uso de materiales alternativos, como materiales reciclados. Y es aquí donde encontramos una oportunidad para el sector y una de las buenas noticias que nos deja el informe estadístico sectorial del año 2022, publicado por Anefa: los áridos reciclados y artificiales siguen aumentando su peso sobre el consumo total, en detrimento de aquellos procedentes de las explotaciones. Sobre los 143,6 millones de toneladas de áridos para la construcción producidos en 2022, 9,1 millones (6,3%) no proceden de explotaciones de áridos, cuando tres años atrás su consumo fue de 6,8 millones, un 4,8% sobre el total. Los principios de la economía circular continúan avanzando en el sector, de forma lenta pero firme. Esto no solo representa un desafío para la industria de los áridos, que debe innovar y adaptarse a las nuevas demandas del mercado, sino también una oportunidad para que las empresas evolucionen y se transformen para abrazar este nuevo modelo productivo. La inversión en innovación podría llevar a la creación de áridos más ligeros y resistentes, que reduzcan la huella ambiental y mejoren la calidad de las construcciones. El crecimiento sostenible y la preservación del medio ambiente han generado una mayor conciencia sobre la extracción de áridos y su impacto en la naturaleza. El sector tiene la necesidad de aplicar prácticas más responsables y sostenibles para garantizar la protección del entorno natural y, a su vez, mejorar su imagen ante la sociedad. El empleo de áridos en la construcción plantea retos significativos para la industria, pero también abre oportunidades para la innovación y el desarrollo sostenible. La colaboración entre los distintos actores involucrados, la inversión en investigación y desarrollo, y la promoción de prácticas más responsables son clave para asegurar un futuro próspero para la industria de áridos. Con una visión a largo plazo y el compromiso de actuar de manera sostenible, la industria puede superar los desafíos actuales y convertirse en motor de un futuro mejor para todos. l
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