30 y explotaciones JORNADAS / JORNADA TÉCNICA AMINER ha destacado el valor fundamental que se sigue en CLC y que es muestra de su éxito: las personas y el respeto al entorno. Asimismo, ha destacado la innovación como pilar fundamental en la producción del cobre: “La innovación y la tecnología que aquí utilizamos son claves y es la bandera que tenemos”, ha afirmado Lucas Alcón. La planta de CLC es única en el mundo gracias a su sistema de tratamiento del cobre, basado en la vía hidrometalúrgica. Este tratamiento elimina el transporte a fundiciones externas y las emisiones de CO2 a la atmósfera. En lo que respecta a la gestión del agua que realizan, Alcón ha explicado que la extracción de cobre se encuentra debajo de un acuífero llamado “NieblaPosadas” por lo que, para preservar y proteger el acuífero, se ha desarrollado un avanzado sistema de sondeos de extracción del agua para volver a reinyectarla en el mismo acuífero una vez tratada. De esta manera se evita su contacto con el mineral y se somete a tratamiento, mejorando la calidad inicial del recurso: “Estamos retornando unas aguas de muchísima calidad. Para le proceso industrial utilizamos las aguas de la depuradora de San Jerónimo en Sevilla. Toda el agua que cae está gestionada de una forma, se realiza la segregación de las aguas fluviales en todo el campo minero”. Por último, el jefe de medioambiente de CLC ha expuesto las claves del proyecto PMR sobre los que ya se están tramitando permisos administrativos para su puesta en marcha. Así, sobre la gestión de residuos, Alcón ha señalado que el futuro proyecto de mina subterránea y refinería polimetalúrgica denominado PMR (siglas en inglés de Poly Metallurgical Refinery), los residuos del tratamiento de mineral quedarán encapsulados en seco. En cuanto a los metales que se van a producir en refinería destacan: el cobre, zinc, plomo y plata, a partir de mineral polimetálico. Como muestra de su apuesta por la innovación, la tecnología patentada por CLC “representa una innovación en la minería mundial al completar el proceso de la mina al metal” y todo ello “hecho en Andalucía”. Una vez puesto en marcha, el proyecto prevé un periodo de actividad de al menos 14 años, con una inversión estimada superior a los 500 millones de euros, a la que se sumarían más de 170 millones en inversiones en energías renovables. El empleo directo en operación alcanzará las 900 personas. Para finalizar, Lucas Alcón ha afirmado que se trata de una “oportunidad” ya que esta tecnología “abre la posibilidad de tratar el material polimetálico externo procedente de otros yacimientos”. Según los últimos estudios geológicos, las reservas de mineral polimetálico en Andalucía se estiman en más de 1.500 millones de toneladas. “El sector tiene que estar orgulloso porque puja por el bienestar y la sostenibilidad en España y especialmente en Andalucía. Es una oportunidad para procesar otro tipo de materiales siempre teniendo en cuenta la famosa economía circular”, ha concluido. Gestión de la biodiversidad La Innovación en la rehabilitación ambiental es también una de las claves de la buena gestión para CLC. La rehabilitación de los terrenos afectados por la actividad minera se realiza de manera progresiva desde el inicio de la actividad. Mediante la restauración progresiva de las escombreras se lleva a cabo la recuperación del suelo y del ecosistema a través de actividades de reforestación y, por ende, dinamiza la economía local tanto durante la explotación minera como el proceso posterior. “Aplicar la jerarquía de mitigación como herramienta de conservación de la biodiversidad y servicios ecosistémicos en todas las fases de un proyecto de desarrollo permitirá tener un ahorro ecológico, social y económico” Futuro proyecto de mina subterránea y refinería polimetalúrgica (PMR).
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