5 y explotaciones El año 2020 ha sido un año en el que la irrupción del COVID19 ha cambiado el rumbo de la vida y de la “normalidad”. La pandemia ha alterado, y continúa alterando, la industria minera y la economía global en una ola de ramificaciones que se transforma constantemente, lo que confirma las necesidades de acción urgente identificadas antes de la pandemia. Con la pandemia del COVID-19 se ha retrasado considerablemente el rumbo de los objetivos que teníamos, como son, entre otros, el progreso de los ODS. Al mismo tiempo, la crisis ha incitado a muchos representantes públicos a instar proyectos apresurados y a reinventarse. En este momento, el principal riesgo para la recuperación podría venir de un impacto estructural sobre el tejido productivo y a una caída de la inversión total que deprima el crecimiento potencial a medio plazo, como ocurrió tras la crisis financiera. Desde los distintos sectores industriales de nuestro país instan a aprovechar esta gran “bocanada de aire fresco” que traerán consigo los fondos de recuperación Next Generation EU. Dichos fondos son el principal instrumento puesto en marcha por las instituciones europeas para afrontar las consecuencias económicas y sociales de la pandemia de coronavirus desatada desde finales de 2019 en todo el planeta. Por este motivo, resulta fundamental acelerar la aprobación y puesta en marcha de los nuevos instrumentos, movilizar de forma eficaz los 750.000 millones de euros de inversión y coordinar un programa de reformas para impulsar el crecimiento y la modernización de la economía a través de toda la Unión. Estos fondos están divididos en dos paquetes: préstamos y subvenciones y otras subvenciones directas. Según adelantaba el Gobierno semanas atrás, esta cantidad equivale a dos veces el gasto que destinó España en el año 2019 a pensiones, sanidad, educación y desempleo. Con este nuevo horizonte, España pretende coger aire para recuperar el pulso y poder ir saliendo de la crisis acentuada por el COVID-19 hace ya más de un año. Desde el sector minero dicen encontrarse esperanzadores con este nuevo escenario que nos espera tras la llegada de los fondos, lo que pretende dar nuevas oportunidades y abrir nuevosmercados. Sin embargo, habrá que ir con pies de plomo ya que todavía son muchas las incógnitas que existen entorno a la aplicación de dichos fondos y es que el resultado final de este Plan de Recuperación no solo dependerá de la estrategia, sino de su apropiación eficaz por empresas, administraciones y agentes sociales. No obstante, tendremos que esperar al mes de septiembre para ver cómo se materializa lo anunciado por el Gobierno durante estas últimas semanas. Con pies de plomo EDITORIAL
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