Con una extensión de 800 metros cuadrados distribuidos en dos plantas, Florentine cuenta con 400 asientos, lo que lo convierte en uno de los restaurantes más grandes y exclusivos de Marbella. Sin embargo, a pesar de su tamaño, cada detalle ha sido cuidadosamente pensado para garantizar que cada rincón del restaurante emane elegancia e intimidad. Los comensales son recibidos por impecables suelos de mármol, luminarias de Murano hechas a mano y muebles de diseño personalizado que reflejan la meticulosa artesanía presente en todo el espacio. Cada pieza, desde las mesas pintadas a mano hasta las sillas hechas a medida, ha sido creada especialmente para realzar la refinada visión estética del restaurante. Al entrar, destaca el intrincado diseño de la cocina abierta, donde el arte culinario del equipo de chefs se exhibe en todo su esplendor. Alrededor de las áreas de cocina y bar, los azulejos seleccionados cuidadosamente complementan la rica paleta de colores de Florentine, mientras que los detalles decorativos se colocan meticulosamente en cada rincón. En este sentido, el techo en sí es una experiencia, con paneles de espejo que reflejan el diseño teatral de la sala y amplifican aún más su grandeza. La experiencia en Florentine continúa cuando los invitados ascienden por la impresionante escalera de caracol situada en el centro del restaurante. Revestida de espejos, esta escalera conduce al primer bar en la azotea de la Milla de Oro de Marbella. Una vez en la azotea, los huéspedes son recibidos por la terraza panorámica con una impresionante barra de cócteles de 360 grados, rodeada de bebidas premium e iluminada por el resplandor del horizonte de Marbella. Con impresionantes vistas a la icónica montaña La Concha, esta azotea es el destino perfecto para disfrutar de cócteles exclusivos o una cena bajo las estrellas, ofreciendo un entorno verdaderamente inolvidable. No obstante, uno de los aspectos más destacados de este espacio se encuentra en la iluminación. Del techo cuelgan grandes luminarias de Murano artesanales que envuelven al comensal, para completar la luz natural que baña este generoso espacio. Se trata de distintas piezas que son arte puro y que convergen con detalles de iluminación más actual, como el muro de neones, en este espacio tan singular. n Detalles del espacio interior donde la decoración juega un papel importante en la experiencia gastronómica. 48 REPORTAJE
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