LA PERCEPCIÓN El tema de interés viene cuando surge la pregunta, ¿cómo perciben los espacios con iluminación cromática las personas con visión alterada? ¿Las sensaciones y emociones asociadas a los colores son culturales y, por ende, un mismo espacio será percibido por todos iguales siempre y cuando compartan una educación común? ¿O realmente la percepción del color afecta el cerebro y cada persona interpreta de distinto modo un mismo espacio? Con el objetivo de poder disipar la duda y ordenar los conceptos se van a separar dos ramas: una más vinculada a la psicología del color (emoción, sentimientos…); y otra vinculada a la percepción espacial (volumetría, profundidad…). Cuando se habla de la psicología del color se hace referencia a la capacidad del mismo para transmitir al receptor determinadas emociones. A base de estudios empíricos se determina qué sienten las personas al percibir cierto color. Por este mismo hecho se puede entrever la importancia de la cultura y la educación. Un mismo color, el rojo, por ejemplo, “se relaciona con la vida en sí misma, ya que es el color de la sangre. También es el color de la guerra, la emoción y el peligro. En Sudáfrica representa el luto, mientras que en la India y otros países asiáticos las novias usan el rojo en sus vestidos de boda. Tiene que ver con la suerte, la felicidad, la belleza y la fertilidad”1. Sin embargo, esto no es tan claro cuando se habla de la percepción espacial. El psicólogo C.C. Liebmann defiende ya en 1922, que tanto el color como la luminosidad de los elementos que conforman una escena pueden alterar su percepción. Como posteriormente determinan otros investigadores que continúan su legado, en condiciones de poca iluminación los colores más luminosos se “acercan” al observador, mientras que en condiciones de mayor iluminación se invierte el efecto debido a la perspectiva aérea. Además de la importancia de la luminosidad, el color es una propiedad de vital importancia y es que, como afirma Lois Swirnoff, cuando no existe la capacidad de percibir profundidad en un espacio, el color es el factor predominante en la organización de los objetos en el espacio. Gracias a todos estos avances, Frank Mahnk puede afirmar posteriormente (1996) que “la iluminación es uno de los factores más importantes en nuestra percepción de amplitud en los espacios interiores. Colores luminosos o pasteles retroceden y aumentan el tamaño aparente de una habitación, al igual que los colores fríos y Fig. 3. Composición propia. Foto original de James Turrell. Variaciones generades por Andrés Echarri Alonso a través de la plataforma Colblindor. 10 AULA CD
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