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PROTAGONISTAS luz y el actor está al lado del público. Con Carmen Conesa hicimos, por ejemplo, hicimos una escena entera con sólo una cerilla. Es la diferencia de trabajar en pequeños y grandes formatos. Amí me gusta ir de un lado a otro continuamente porque me pone los pies en el suelo. Aparte de humildad tambiénme devuelve a la realidad porque en el mundo teatral puedo diseñar un espectáculo con muchos focos, pero luego el productor va a defender tu trabajo con los focos que tú llevas o con los focos que ya hay en los teatros. Precisamente, los teatros de España están bien dotados, pero el problema es que no tienen presupuesto para fungibles, para mantenimiento. Siempre cuando programo un espectáculo intento llevar un programador de mi confianza y lo que intento transmitirle es que entienda la luz y porqué lo hemos diseñado así. El día que tenemos 120 focos estupendo, cuando sólo tenemos 80 ya falla algo, pero si sólo tengo 30 hay que intentar contar lo mismo con esos 30 que como 120. Es momento de contar con la luz. Su trabajo culmina cuando se estrena el espectáculo. Sí, entonces es el equipo de luces quien mantiene mi trabajo y siempre que puedo regreso a revisar mis trabajos. ¿Se ha encontrado solo en esta profesión? Me considero un privilegiado. Sigo siendo ese chaval inquieto de Alicante, que estaba en el grupo de teatro del instituto, mis amigos tenían un grupo de heavy metal y yo era el pipa, que cantaba en el coro del instituto… siempre estaba enredando. De hecho, en la la empresa que nos ponía las luces de repente me ofrecieron trabajar con ellos, después me fui al teatro Principal de Alicante y ahí conocí a la gente de la Compañía Nacional de Teatro Clásico y en Madrid me ofrecieron, con 23 años, entrar en su oficina técnica. He tenido la oportunidad de trabajar con iluminadores como Juan Gómez Cornejo, Josep Solbes, Quico Gutiérrez, con mi maestro Carlos Cytrisnowski, con los mejores escenógrafos como Andrea D´Orico, Gerardo Vera y directores como Adolfo Marsillach, Pilar Miró, Gerardo Malla... ¿En qué arte escénica se apasiona más? ¿Hay algún tipo de escenografía donde se sienta más cómodo? Yo estoy enamorado de la luz y mi trabajo es la luz. Me da lo mismo hacer un musical, un edificio, una obra de teatro, un espectáculo de danza… es la luz lo que me lleva a ese estado. No podría decantarme por ninguno. Es una persona laureada por su carrera profesional, ¿cuál ha sido el mayor reto en su carrera profesional? Me siento satisfecho con todos mis trabajos, sea un proyecto de 8 focos o de 250. Hay una cosa quemantengo y es ponerme nervioso y apretar los dientes hasta que no veo el primer foco que se enciende sobre una escenografía o sobre una pista de circo. A diferencia de escenógrafos que ven su trabajo, figurinistas, sonido… nosotros no vemos nuestra luz por mucho visualizador que hay hasta que no llegamos al lugar. Somos los primeros que montamos, porque, si no, no se puedenmontar el resto de elementos, y a cruzar los dedos. El reto es continuo en cada trabajo y lo que sí he sido siempre es valiente. Cuandome llamaron para iluminar por primera vez el edificio del Palacio de Cibeles para unas Navidades, no había iluminado un edificio de esas 53

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