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EXPERIENCIA LUDWIG MIES VAN DER ROHE (1886-1969) Del mismo modo que sucede con Le Corbusier, fue la luz natural y no la arti- ficial la que determinó la forma de su arquitectura. Fue la participación del diseñador de iluminación estadouni- dense Richard Kelly, quien también trabajó con Saarinen o Kahn, la que contribuyó al cambio de expresión de los rascacielos de vidrio de Mies Van der Rohe. La voluntad inicial de complejidad superficial, justificada por los reflejos de la luz natural, se vio transformada hacia una simplificación superficial. Sus fachadas de vidrio les otorgaron una transparencia material y visual tanto diurna como nocturna, llegando a ofrecer la imagen interior como la verdadera fachada. La iluminación artificial mediante planos uniformes reforzó la visión de la estruc- tura de las fachadas. Los edificios de Mies pierden su peso y compacidad volumé- trica en el momento de ser iluminados con luz artificial. La superficie se evade para dar paso a la estructura, el ritmo y la modulación. Los edificios de Mies pierden su peso y compacidad volumétrica en el momento de ser iluminados con luz artificial. La superficie se evade para dar paso a la estructura, el ritmo y la modulación. 10