nº 27 - pág 95 [tierras CAPRINO 2019 El mercado de la leche de cabra vive uno de los mejores años que se recuerdan para los productores españoles. Los continuos incrementos en el precio, que se explican por el descenso de la producción y el aumento de la demanda interna y externa, además de por las características propias de elasticidad del mercado de la leche de cabra, están dando una importante rentabilidad a los ganaderos, que han observado unos precios al alza incluso durante el segundo trimestre del año, cuando el aumento estacional de la producción hace que históricamente los precios se resientan a la baja. Este año no ha sido así, por lo que las miradas del sector ya están puestas en el mes de octubre, cuando comience el tercer trimestre del año y baje la producción de forma estacional, lo que podría provocar que los precios se situasen en niveles totalmente históricos en el caprino lechero español. LOS DATOS DEL SECTOR El mercado del caprino lechero continúa por los mismos derroteros que hace unos meses. La bajada de producción continúa y, según los datos oficiales que publica el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA), por el momento no parece encontrar suelo. Ese descenso, junto con la mayor demanda que están provocando las propias industrias nacionales por un cierto tirón ante los consumidores de los productos elaborados con leche de cabra, además de un interés de industrias asiáticas por la leche de cabra en polvo, están provocando que los precios del año 2019 sean similares a los históricos del ejercicio 2014, después de varios años de cotizaciones bajas que han tenido que sufrir los productores de este subsector ganaderos. ► Producción El dato más revelador sobre el funcionamiento actual del mercado es el de la producción, que es aportado por el FEGA a través de las entregas oficiales de leche. En el periodo de enero a mayo, último actualizado por estas estadísticas oficiales al cierre de esta revista, se dibuja un descenso del 4,1% en los cinco primeros meses del año. En términos absolutos, se trata de una pérdida de producción en todo el sector que se cifra en algo más de 9 millones de litros de leche de cabra. Esta realidad que dibujan los datos globales es la misma que se percibe por algunas de las grandes cooperativas españolas consultadas, que sitúan los niveles de reducción de la producción alrededor del 5%. Entre las comunidades autónomas que son líderes en la producción de leche de cabra en España, destaca el caso de Murcia, que en este periodo de los cinco primeros meses del año ha llegado a descender un 9,9% en su producción. Lo más curioso es que esta región ha sido históricamente una de las que ha tenido unos precios más altos de la leche de cabra, algo que sigue ocurriendo en la actualidad, lo que no explicaría ese notable descenso de la producción. Se da la circunstancia de que Murcia se ha registrado un significativo descenso en el número de LA MIRADA PUESTA EN OCTUBRE ganaderos, fundamentalmente de perfil pequeño-medio. Aunque se trataba de producciones limitadas, lo cierto es que esa reducción de la cantidad de leche que se ponía en el mercado no ha podido ser absorbida, al menos por el momento, por parte de las explotaciones con una mayor dimensión. Por lo tanto, esa fuerte reestructuración del sector ganadero murciano ha influido de forma directa en la producción. En el caso de Castilla-La Mancha, la reducción también se sitúa por encima de la media nacional, en concreto en el 5%. Por último, Andalucía está sujetando su producción en el último año y únicamente desciende un 3,2%. Desde algunos ámbitos, se observa este descenso matizado de la producción como una reacción que han tenido los ganaderos andaluces a la buena situación del mercado, lo que ha llevado en algunos casos a renunciar a participar en el programa voluntario de tuberculosis caprina puesto en marcha por la Junta de Andalucía, por el temor a que muchos de sus buenos animales productores fueran sacrificados. En esta coyuntura, la producción ha bajado, pero en niveles más o menos asumibles. (Ver Tabla 1) ► Precios Esos algo más de 9 millones de litros de leche de cabra que se han dejado de producir en España, contabilizando únicamente los cinco primeros meses del año, unido a la trayectoria descendente que ya se venía arrastrando del último trimestre de 2018, provocó que los precios de la leche de cabra hayan cambiado sustancialmente. La bajada de producción no es la única razón que explica ese cambio de rumbo tan relevante en el mercado de la leche de cabra. Según apunta expertos en el sector caprino, se ha producido también un incremento de la demanda de las industrias nacionales, debido a la mayor demanda de los consumidores de los productos derivados de la leche de cabra y a que, en algunos casos, las industrias lácteas han tenido que afrontar sus operaciones con la distribución con falta de ‘stock’ en sus cámaras. Además, han aparecido nuevos compradores que han animado el mercado y también ha influido la venta de leche de cabra en polvo al exterior, sobre todo al mercado asiático. Tampoco es desdeñable una cierta dinámica del miedo que pervive en el mercado de la leche de cabra, que hace que movimientos moderados de producción se trasladen a fuertes vaivenes en el precio, ya sean al alza o a la baja. Así, ante los descensos de producción que se venían registrando desde la mitad del pasado año, las industrias queseras han querido posicionarse y asegurarse el suministro, con una cierta rivalidad en algunas zonas de las propias empresas por hacerse con las rutas de recogida. Todo ello ha influido para que los precios subieran de una forma muy contundente. Los datos medios indican que se ha subido de 6,65 a 8,34 euros por hectogrado, es decir, de 11,06 a 13,88 pesetas por grado de extracto quesero (suma de los porcentajes de grasa y proteína). Esta dinámica se repite en prácticamente todas las comunidades autónomas, con la única excepción de Canarias, Mercados de la Leche ✚
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