Y es que, como muchos arquitectos y visionarios han demostrado durante un período de más de un siglo, la recreación del espacio urbano en el cielo a través de las conexiones entre edificios en altura tiene un gran potencial para el enriquecimiento de nuestras ciudades. Para muchos, parece absurdo que, aunque en el siglo XX, y ahora en el siglo XXI, se haya visto claramente un impulso hacia una mayor altura y densidad urbana en nuestras principales ciudades, el nivel ‘calle’ sigue siendo casi exclusivamente el único plano físico de conexión entre ellos. Amedida que el mundo se urbaniza rápidamente, es necesario dedicar mayor atención a cómo se puede desarrollar el espacio horizontal en altura. Pero sigue habiendo obstáculos culturales, organizativos y jurisdiccionales. Para superar esto, es necesario establecer una información clara sobre los beneficios de los skybridge en una aplicación mucho más amplia de lo que se ha visto históricamente. El CTBUH cree que es probable que veamos más puentes aéreos y más desarrollo horizontal en altura entre edificios altos, pero no hay garantía de que estos sean de alta calidad a menos que comencemos a analizar seriamente si funcionan en los espacios existentes, y aprendamos de ello. Por lo tanto, esta investigación marca un hito importante en el desarrollo de un espacio urbano que ha persistido a través de visiones utópicas y emergió como una solución puntual y práctica en casos aislados, pero ahora está emergiendo como una importante tipología de diseño. Esta investigación busca proporcionar un marco para comprender mejor el puente aéreo y mejorarlo. Sobre la base de la evaluación de los desafíos y las soluciones existentes, la investigación apunta a desarrollar un conjunto preliminar de pautas para los futuros desarrolladores de puentes aéreos, teniendo en cuenta los cambios tecnológicos como los ascensores horizontales y los cambios urbanos que abarcan los puentes aéreos como parte del paisaje urbano. Por otra parte, Schindler es el impulsor y patrocinador de un proyecto de investigación de dos años sobre «Robótica en la construcción de edificios altos». Esta investigación explorará el nuevo y prometedor reino de la robótica de edificios altos, identificando áreas en las que la calidad y la velocidad de la construcción de edificios podrían mejorarse mediante el uso de dichas tecnologías, manteniendo al mismo tiempo el más alto grado de seguridad. Esta información se publicará en forma de un Informe de Investigación de CTBUH, que resumirá la información sobre las tecnologías de construcción automatizadas que podrían introducirse en los próximos años. La industria automotriz es probablemente el campo que ha experimentado los cambios más significativos en la transición de una fuerza laboral humana a una fuerza laboral robótica. Los robots han sido altamente efectivos y ventajosos para realizar tareas que son repetitivas (por ejemplo, atornillado), requieren altos niveles de precisión (soldadura), o son peligrosos para la salud de los trabajadores (pintura). Si bien la fuerza laboral humana en este sector se ha reducido significativamente, se han creado nuevos puestos de trabajo en el diseño, construcción y operación de tales robots. Se han realizado grandes desarrollos en la modernización de la industria de la construcción durante los más de 30 años, con estudios teóricos y aplicaciones en el sitio de varias máquinas y robots que varían en complejidad y escala: desde pequeñas máquinas de una sola tarea hasta grandes fábricas informatizadas. La gran mayoría de estos desarrollos se han producido en Japón, donde la automatización y los robots ya se han utilizado en la construcción de edificios en diferentes alturas, tipologías y complejidades. Esta investigación propuesta investigará, junto con la red de expertos internacionales de CTBUH (desarrolladores, diseñadores, empresas de construcción, topógrafos de calidad, etc.), el futuro de este campo prometedor, identificando las razones por las cuales estas tecnologías no han podido evolucionar significativamente, más allá de ciertos ejemplos aislados y por qué no han sido «demandados» por la industria de la construcción en los mercados de edificios altos más avanzados. Losmás altos Cada año, el Consejo de Edificios Altos y Hábitat Urbano (CTBUH) publica un estudio que examina todos los edificios altos de más de 200 metros que se completaron durante el año anterior. Los 144 edificios terminados en 2017 superaron todos los récords anteriores, incluido el de 127 terminados en 2016. Esto hace que el número total de edificios de más de 200 metros en el mundo sea de 1.319, lo que representa un aumento del 12,3% en comparación con 2016 y del 402% con respecto al año 2000, cuando solo existían 263. Un total de 15 edificios súper-altos (de 300 metros o más) se completaron en 2017, empatando con 2015, el primer año en romper este récord. El número total de edificios súper-altos en todo el mundo es ahora de 126, comparado con los 111 en 2016. Esto es aún más extraordinario si se considera que gran parte de la actividad ha sido en los últimos años. La cifra de 2017 representa un incremento del 66% en solo cuatro años, ya que en 2013, había 76 edificios de 300 metros o más. China sigue liderando el mundo en la categoría de más de 200 metros aunque países como India, aceleran en términos de crecimiento económico y poblacional. Norteamérica, que durante gran parte del siglo XX completó la mayoría de los edificios de más de 200 metros en el mundo, empieza también a ver un resurgimiento de la construcción de edificios en altura. Además, las nuevas tecnologías y los flujos de capital interancionales están facilitando la creación de rascacielos cada vez más altos. Para este ejercicio 2018 se espera completar entre 130 y 160 edificios de 200 metros, de los cuales, entre 12 y 20 serán de 300 metros o más altos), si bien la evolución económica y la volatilidad política en muchos lugares de un mundo cada vez más interconectado podrían provocar cambios, según advierten desde CTBUH. 42-Ascensores yMontacargas
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