de ascensores (EN 81-20, 21, 28, 50, 70, 72, 73, 77) en el idioma nacional de Estonia, Grecia, Italia, Portugal, Países Bajos y España. El resultado es bastante frustrante: en lo que se refiere a EN 81-20, es decir, el estándar armonizado más importante para el sector, en tres países (Estonia, Grecia y Portugal) la versión nacional no está disponible. Según los datos accesibles en Internet, España es el único país donde los ocho estándares están disponibles en el idioma nacional; en Italia hay seis estándares traducidos al italiano; en los Países Bajos solo tres están disponibles en holandés; en Portugal hay dos en portugués; mientras que Estonia y Grecia tienen solo un estándar en sus idiomas nacionales. Con la participación de las nuevas generaciones, lo más probable es que esta necesidad de traducciones en los idiomas nacionales sea cada vez menos importante, pero hoy en día sigue siendo uno de los principales obstáculos para el acceso de las pymes de elevación a los estándares de su interés. Los costes La segunda gran barrera de acceso a los estándares son los costes. Los precios de las normas son bastante elevados y no tienen en cuenta la capacidad financiera limitada de las pymes. En su investigación, EFESME percibió que el coste de las normas traducidas en el idioma nacional es generalmente más alto que las versiones en inglés. Entre los países estudiados, solo España y Alemania proponen estándares traducidos a un precio más bajo. Otra observación se refiere a los descuentos ofrecidos por algunas organizaciones nacionales de normalización a sus miembros. Un ejemplo significativo es el del Reino Unido: la NSO británica, que vende estándares con descuentos del 50% para sus miembros, calcula su tarifa de membresía en una proporción entre el tamaño de la empresa (número de empleados) y la facturación. De todos modos, en los casos que investigó EFESME no se aprecia una diferencia de precios entre las pymes y las grandes empresas. Esta uniformidad en los precios dificulta la integración de las pymes en el mercado y también pone dificultades de competencia. Según la Federación, una solución podría ser concebir paquetes estándar que contengan todas las normas TC10 a un precio especial reducido para las pymes de ascensores, un sistema que ya existe en algunas entidades nacionales. Representatividad La tercera barrera sigue siendo la representatividad de las pymes de elevación en el CEN/TC10. A pesar del compromiso de EFESME con este tema, aún queda camino por hacer. Las pymes continúan estando subrepresentadas en términos de número de delegados en el TC en relación a las grandes empresas. Al ser las pymes incapaces de influir en el desarrollo de normas, la disparidad de condiciones en el mercado descrita en los puntos anteriores se refleja también en un nivel político. La falta de representatividad de las pymes en el CEN/TC10 es un reflejo también de la falta de representantes de pequeñas y medianas empresas de elevación dentro de las oficinas nacionales: aparte del caso italiano, hay muy pocos representantes de pymes que asistan a los comités técnicos de ascensores nacionales en las organizaciones europeas. Por esa razón, las pequeñas y medianas empresas esperan que la política de la Comisión Europea incluya un apoyo adicional en forma de una tarifa de participación mucho más baja que les permita unirse a las NSO relevantes y, además, una subvención integral para los gastos incurridos en la participación en el CEN TC10 y las actividades relevantes de los grupos de trabajo. Conclusión EFESME considera que el acceso a los estándares y procesos de desarrollo estándar para las microempresas debe ser tan fácil como lo es para las grandes compañías. El artículo 6 del Reglamento UE 1025/2012 identifica a las NSO como la principal herramienta para facilitar un mejor acceso a las normas técnicas y al proceso de normalización por parte de las pymes y, además, indica algunas medidas operativas. Sin embargo, más de cuatro años después de la entrada en vigor de la regulación, los resultados son decepcionantes, al menos en el sector de la elevación. EFESME está observando hasta hoy dificultades serias y generalizadas con respecto a la disponibilidad de estándares en los idiomas nacionales, al precio de las normas y a la participación de las pymes en el proceso de normalización, tanto a nivel nacional como europeo. Por eso, la Federación cree necesario un esfuerzo mucho mayor del sistema europeo de normalización para garantizar un mejor acceso a los estándares para las pequeñas empresas, de manera que plantea diversas medidas: - Que el CEN garantice la publicación simultánea de normas en todos los idiomas nacionales de la UE o, de forma alternativa, al menos en los idiomas de los países en los que el número de empresas activas en el mercado de referencia específico sea más elevado. - Que las oficinas nacionales de normalización adopten políticas de precios preferenciales y asequibles para las pymes mediante la creación de ofertas especiales para ellas que reflejen una diferencia de precio razonable en comparación con las grandes empresas. - Que se mantenga y refuerce el apoyo de la Comisión Europea a las organizaciones europeas que representan a las pymes en las actividades europeas de normalización y, al mismo tiempo, que se promuevan esquemas de apoyo similares a nivel nacional a fin de financiar la participación de los representantes de este tipo de empresas en las actividades nacionales de normalización. 31 - Ascensores y Montacargas
RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx