El primer ascensor para bicicletas mercados Las actuales tendencias de concienciación medioambiental, medios de transporte respetuosos y que favorezcan un estilo de vida más sano y, muy especialmente, de las cada vez más populares bicicletas, han dado lugar a un remonte mecánico ideado para su uso urbano y destinado a los ciclistas: el Cyclocable. Desarrollado por el Grupo Poma, a través de su filial Skirail y mediante un acuerdo de partenariado con J. Wanvik, su creador, el principio del actual Cyclocable es sencillo: un taco de empuje llamado ‘pedal’ permite al ciclista tomar apoyo con el pie al arrancar el aparato. Arrastrados por un cable, los ‘pedales’ empujan a los ciclistas por la cuesta para que asciendan sin esfuerzo. A la llegada, los ‘pedales’ se retraen automáticamente bajo la calzada para volver al punto de partida, dentro de una caja enterrada bajo la calzada. Un poco de historia. El primer remonte de este tipo, el ‘ascensor de bicicletas’ Trampe, fue inventado en 1993 por un diseñador noruego: Jarle Wanvik. Durante 15 años de servicio, en la ciudad noruega de Trondheim, Trampe ayudó a subir a más de 200.000 ciclistas los 130 m de la larga colina Brubakeen y, casi desde el principio, se convirtió en una de las atracciones turísticas más populares de la ciudad. En 2013, Trampe se renovó como respuesta a las nuevas normativas de seguridad y la nueva versión industrializada, CycloCable, se presenta ahora al mercado internacional. La experiencia acumulada a lo largo de los 16 años de explotación del ‘ascensor de bicicletas’ Trampe , sumada a los 73 años de experiencia del Grupo Poma en el ámbito del transporte por cable han culminado en el Cyclocable, moderno, conforme a las exigencias europeas y desarrollado a partir de tres criterios principales: seguridad, respeto medioambiental y ahorro. Seguridad. Para garantizar la máxima seguridad, el ‘pedal’ se retrae automáticamente dentro del suelo para el caso en el que el ciclista tuviera que abandonar la instalación sin llegar al final del recorrido; esta particularidad técnica, patentada por Skirail, permite eliminar cualquier riesgo de colisión con otros vehículos o peatones. Por lo tanto, el Cyclocable puede ser instalado en un carril compartido para permitir ascender sin riesgo a lo largo de un vial utilizada por otros. Respeto al medio ambiente. El aparato funciona con electricidad. Su instalación es totalmente subterránea, a muy poca profundidad. Esta configuración permite mantener un nivel sonoro muy bajo. CYCLOCABLE SE PERFILA COMO UNA OPCIÓN DE FUTURO DENTRO DE LAS ACTUALES TENDENCIAS DE LAS CIUDADES HACIA EL TRANSPORTE SOSTENIBLE Y RESPETUOSO CON EL MEDIO AMBIENTE. Ahorro. Totalmente automático, este aparato funciona en régimen de auto-servicio, sin personal de explotación. Los trabajos de realización y de integración en el emplazamiento son muy sencillos por lo que el plazo de instalación in situ es muy corto. Estos tres criterios hacen del Cyclocable un producto que se enmarca perfectamente dentro de las iniciativas de desarrollo sostenible y de eco-movilidad de las ciudades actuales. Buenas prestaciones. Si bien la instalación en funcionamiento en Trondheim es de 130 m., los calculos realizados por la empresa responsable aseguran que el Cyclocable puede realizar un recorrido máximo de 500 metros, con una velocidad de remonte de 1,5 — 2 metros por segundo y con una capcidad máxima de 300 ciclistas por hora -hasta cinco cliclistas podrían usar el ascensor simultáneamente-. Su funcionamiento recuerda a la de un remonte de sky: consiste en una cuerda metálica con 11 soportes para el pie fijados a la misma. En el punto de partida, hay un acelerador (una especie de pistón), para hacer la salida más fácil. Cuando se deja de pisar la plataforma para el pie, ésta desaparece bajo la calzada. Los costes de instalación de este sistema, según sus desarrolladores, no son superiores a los de crear un carril de bicicletas convencional en cualquier ciudad. Buenas perspectivas. Como único ascensor para bicicletas existente en el mercado, las perspectivas de futuro para Trampe/CycloCable® son buenas. Y es que, muchas ciudades se conciencian de manera creciente de las grandes ventajas de apoyar el ciclismo como medio de transporte urbano y son muchas las que tienen importantes necesidades en cuanto a carriles especial, instalaciones de parking, etc. Si bien anteriormente no ha habido mucho dinero disponible para invertir en infraestructuras para bicicletas, esta situación está cambiando de forma radical en los últimos tiempos, a la vista de los efectos positivos de este transporte a la hora de aliviar los atascos de tráfico, los problemas de aparcamiento o la contaminación. De ahí que Skirail y Poma estén actualmente en conversaciones con distintas ciudades en Europa, Estados Unidos, Canadá e incluso países de Extremo Oriente como Corea del Sur. Todos ellos están interesados en la instalación de ascensores para biciletas en los prócimos años, si bien aún son muchas las carencias de la mayoría de las ciudades en cuanto a infraestructuras para bicicletas. 106 - Ascensores y Montacargas
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