Al acto asist ieron Andreas Schierenbeck y Patrick Bass, consejero delegado y director ejecutivo, y responsable de I+D y PLM de ThyssenKrupp Elevator AG, respectivamente, así como Ramón Sotomayor, consejero delegado de ThyssenKrupp Elevator para Sur de Europa, África y Oriente Medio. Andreas Schierenbeck destacó el cambio que representa Accel en los desplazamientos urbanos al «reducir los tiempos de tránsito» en lugares como la red aeroportuaria (entre terminales, aparcamiento y metropolitano), la red de metro (transbordo entre estaciones), los parques de atracciones y los recintos feriales. Cubre distancias entre 100 y 500 metros, y permite trasladar hasta 7.300 pasajeros por hora y sentido. Su funcionamiento se basa en la combinación de suaves cambios de velocidad: mediante el uso de una banda de paletas solapadas que se expanden hasta tres veces su tamaño original, los pasajeros acceden a la cinta a velocidad normal de paseo de 0,65m/s (2,35 km/h.), aceleran suavemente hasta los 2 m/s (7,2 km./h.) y vuelven a decelerar a velocidad normal de paseo antes de abandonar el sistema. Aquellos pasajeros que siguen caminando sobre la cinta, pueden alcanzar velocidades de hasta 3,3 m/s (12 km/h). En los aeropuertos, por ejemplo, Accel supone una sustancial mejora de los tiempos de tránsito entre las puertas de embarque. Los pasajeros sólo necesitarán 140 segundos para cubrir una distancia de 270 metros, en lugar de los 415 segundos que requerían hasta ahora, lo que significa un ahorro de tiempo de 66%. Para los operadores aeroportuarios, elimina la necesidad de proporcionar autobuses, transportes automatizados o trenes lanzadera para distancias de hasta 1,5 km, además de los elevados costes asociados a ello. Facilidad de instalación A caballo entre el transporte automatizado de pasajeros en aeropuertos y los pasillos rodantes convencionales, el nuevo sistema -que será fabricado en la factoría asturiana y en cuyo Centro de Innovación se hizo una demostración- utiliza la tecnología matriz lineal procedente del tren magnético Transrapid. Patrick Bass insistió en la comodidad y fiabilidad del producto, añadiendo que su uso «es divertido». La cinta de la paleta y el pasamanos son dos sistemas independientes que funcionan con precisión y sincronía, y los pasajeros sienten en todo momento que se mueven a la misma velocidad, experimentando un desplazamiento suave y seguro. Resaltó igualmente que no son precisas complejas obras de ingeniería, ni siquiera espacios amplios para su instalación (basta un foso de 1 metro), pudiéndose incluso aprovechar infraestructuras existentes. Asimismo, se pasa de un sistema mecánico a otro eléctrico, lo que implica un 20% de mejora como mínimo de la eficiencia energética. El coste Accel se presenta como una alternativa a la construcción de nuevas estaciones subterráneas o la excavación de conexiones subterráneas. Y en cuanto a su coste, los responsables de la compañía no quisieron concretarlo, si bien, a preguntas de este medio informativo, apuntaron a que estaba a medio camino entre la cinta tradicional y el sistema automatizado de los aeropuertos. 22 - Ascensores y Montacargas
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