ANÁLISIS 90 En la última década, la evolución de la tecnología ha alcanzado un ritmo increíble que hace que, en ocasiones, tanto a los particulares como a las empresas les resulte difícil mantenerse al día de las últimas tecnologías. Aunque el de la construcción no es un sector conocido por su eficiencia e innovación, algunas de estas tecnologías se han abierto camino en él. De hecho, el BIM podría haber sido el primer intento del sector de la construcción de digitalizar y agilizar sus procesos, además de aumentar la colaboración entre los equipos de proyecto. En cualquier caso, hay que tener en cuenta que la entrega de proyectos de transporte vertical mediante BIM sigue un planteamiento diferente al de los arquitectos o los ingenieros de estructuras. Y es que, mientras que la mayoría de estas disciplinas elaboran sus diseños planta por planta, los ascensores y las escaleras mecánicas tienen, inevitablemente, más de una planta a la vez. ¿QUÉ ES Y QUÉ NO ES BIM? El BIM (Building Information Modelling) se define en la norma ISO19650-1 como el “uso de una representación digital compartida de un activo construido para facilitar los procesos de diseño, construcción y explotación con el fin de constituir una base fiable para la toma de decisiones”. Pese a existir desde hace relativamente mucho tiempo en el sector de la construcción, el BIM se entiende como un término nuevo o incluso desconocido para la mayoría de los profesionales del transporte vertical. Cuando se enfrentan por primera vez a la pregunta ‘¿puede su empresa cumplir los requisitos BIM del proyecto?’, las firmas de transporte vertical empiezan a buscar respuestas –por ejemplo, en su departamento de ingeniería– que les den la confianza suficiente para responder positivamente a sus clientes. Sin embargo, algunas de estas respuestas pueden llevar a estas empresas en la dirección equivocada. En los párrafos siguientes se describe lo que no es BIM: • BIM no es solo un modelo 3D. Aunque es cierto que se producen modelos 3D como parte de los entregables BIM, el Un facilitador de proyectos que permite trabajar de forma más colaborativa y aumentar la eficiencia en todas las fases EL SECTOR DEL ASCENSOR Y EL BIM Aunque el término BIM (Building Information Modelling) no es nuevo para ninguna persona o empresa que trabaje en el sector de la construcción, el sector del transporte vertical sigue considerando que el uso del BIM es más bien ‘nuevo’, a pesar de ser obligatorio en algunos países para todos los proyectos públicos desde hace algunos años. En este contexto, el BIM no solo ha demostrado ser un facilitador para diferentes actores dentro de la industria de la construcción, sino que los modelos digitales de los ascensores y las escaleras mecánicas están totalmente integrados y coordinados con los arquitectónicos y estructurales desde el inicio del proyecto, lo que permite una aprobación más rápida del diseño y, por tanto, una entrega más rápida para la fabricación. Todo ello, combinado con la reducción de errores en la obra, se traduce en un mayor índice de satisfacción del cliente. En este artículo –presentado durante el 13º Lift & Escalator Symposium de septiembre de 2022– se analiza cómo el BIM puede ayudar al sector del transporte vertical a convertirse en una disciplina más integrada dentro de los proyectos de construcción y cómo el uso de este tipo de procesos puede ayudar a los profesionales del sector a entregar los proyectos con mayor precisión, eficacia y calidad. Miguel Castro. Senior Global BIM Manager en Schindler Group
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