AU18 - Automoción

49 SOSTENIBILIDAD De este 97,5% de vehículos al final de su vida útil, recientemente se ha reciclado el 86,6% del material, según la Agencia Federal Alemana de Medio Ambiente (UBA). Sin embargo, aquí también hay margen de mejora. La UBA critica que el reciclado de materiales conduce con demasiada frecuencia al ‘downcycling’: los materiales secundarios recuperados se utilizan en aplicaciones que no se corresponden con su valor original. Por ejemplo, el acero de alta calidad procedente de los automóviles se reutiliza a menudo como acero para la construcción. El valioso vidrio de los coches suele acabar como material aislante o de relleno para vertederos, ya que los revestimientos del vidrio son difíciles de eliminar, lo que facilita su ‘downcycling’. En el caso de los materiales no metálicos, el reciclado para preservar el valor es más la excepción que la regla: Según la UBA, sólo se recicla el 13,5% de los plásticos y el 8,3% del vidrio. LA TECNOLOGÍA DE SENSORES LÁSER AYUDA A CERRAR LOS CICLOS DE LOS MATERIALES Fraunhofer ILT tiene una solución que puede mejorar significativamente el reciclado y minimizar el ‘downcycling’ de altas pérdidas mediante análisis altamente eficientes, fiables y diferenciados de los materiales valiosos contenidos en los flujos de residuos: la espectroscopia de descomposición inducida por láser (LIBS) es una de las tecnologías clave para una economía basada en ciclos de materiales reales. Esto se debe a que la determinación espectroscópica de gran precisión y en tiempo real de los elementos químicos que contienen los materiales permite una separación diferenciada por tipos. Para la espectroscopia, un pulso láser de alta energía excita la superficie del material. Esto crea un plasma en el que se rompen los enlaces químicos entre los elementos del material. La huella atómica es diferente para cada material y puede leerse espectroscópicamente en el momento en que los átomos vuelven a su estado estable: Emiten luz en longitudes de onda específicas, a partir de las cuales puede deducirse el elemento respectivo. La LIBS, por tanto, revela la composición química exacta del material excitado por láser en fracciones de segundo. Este método sin contacto puede aplicarse a todos los materiales, ya sean sólidos, líquidos o gaseosos. El grupo de trabajo de análisis de materiales del Dr. Cord Fricke-Begemann en Fraunhofer ILT está impulsando el desarrollo de procesos en línea basados en la tecnología LIBS para allanar el camino hacia la recuperación sin mezcla de metales de montañas de residuos y chatarra. “Utilizando una selección de puntos de medición basada en un escáner y unas 100 mediciones LIBS por segundo, podemos crear muy rápidamente representaciones bidimensionales de la distribución de elementos. Basándonos en estos análisis espacialmente resueltos, podemos detectar metales tecnológicos en los residuos electrónicos y así, por ejemplo, devolver al ciclo de materiales el valioso tántalo de los condensadores”, explica el científico del Fraunhofer ILT. RECICLADO DE ALUMINIO: EL LÁSER GARANTIZA UNA MAYOR PUREZA Especialmente en el caso de composiciones complejas de materiales —como en los residuos electrónicos o los vehículos al final de su vida útil—, el reciclado uno a uno depende fundamentalmente de la determinación y separación precisas y espacialmente resueltas de las distintas fracciones de material. Sólo si las empresas de reciclaje son capaces de determinar las composiciones químicas exactas en tiempo real y clasificar los residuos sobre esta base, será factible una reutilización eficiente sin necesidad de reciclado descendente. Y esto es para lo que LIBS sienta las bases: la separación automatizada y sin mezclas de una amplia gama de aleaciones metálicas mediante el análisis de materiales sin contacto, basado en láser y casi en tiempo real. El proceso ayuda a los usuarios a determinar Los ciclos cerrados de materiales sin reciclado descendente allanan el camino hacia la economía circular. Con el proceso LIBS, el Fraunhofer ILT está desarrollando un componente tecnológico clave para ello. Foto: Fraunhofer ILT, Aquisgrán, Alemania / Alfred Neuwald.

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