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54 REHABILITACIÓN Gordillo’s Cal de Morón es el último calero de España. Se trata de una empresa que cuenta con más de 150 años de existencia y que, pese a la introducción de sistemas tecnológicos que permiten optimizar su proceso productivo, en esta empresa situada en Morón de la Frontera (Sevilla) se continúa fabricando cal artesanal con la misma técnica que en 1874. “A mediados del siglo pasado, la cal vivió un importante altibajo con la entrada del cemento y los plásticos en el sector de la construcción, en el que se apostaban por los aditivos químicos. Esta fue una de las principales causas de la desaparición de prácticamente todos los caleros del país, a excepción del nuestro. Fue el momento de cambiar la estrategia de la compañía y apostar por el patrimonio arquitectónico, que requería de nuestros productos para conservar el estado de original de muchas de las fincas históricas de nuestra región”, explica Isidoro Gordillo, quinta generación y gerente de Gordillo’s Cal de Morón. Para ello, la cal se fabrica en el mismo horno milenario de la familia y el proceso productivo se hereda de padres a hijos. En la actualidad, la compañía cuenta con 15 empleados, con una capacidad productiva de uno 100.000 kg de cal cada 8-10 día, aproximadamente. Para el proceso, desde una cantera cercana, se seleccionan las mejores vetas de piedra caliza y se alimenta el combustible con leña de olivo, que debe estar entre 900°C y 1.100°C. Gordillo’s Cal de Morón cuenta con varios productos en el mercado, como cal viva, cales en pasta, morteros en polvo y en pasta, y pinturas de cal, para dar respuesta a las necesidades del mercado actual, de los cuales un 20% destina a exportación. GORDILLO’S CAL DE MORÓN FABRICA CAL DE FORMA ARTESANAL DESDE HACE MÁS DE 150 AÑOS TRAS LOS PASOS DEL ÚLTIMO CALERO DE ESPAÑA La bioconstrucción ha devuelto a los procesos artesanales el valor oculto por sistemas constructivos más avanzados, pero nocivos para la salud. Las recientes corrientes alrededor de la sostenibilidad y la arquitectura saludable o neuroarquitectura han contribuido a que empresas como Gordillo’s Cal de Morón recuperen parte de la cuota de mercado, como una alternativa real, sobre todo, en procesos de rehabilitación y restauración patrimonial, uno de sus ejes estratégicos. Mònica Escolà Imagen del horno milenario que se alimenta de leña de olivo y donde se selecciona la piedra caliza para la producción de la cal de Morón.

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