PPROYECTO No obstante, el proyecto no se gestó de cero, ya que Manuel García, cuando recibió el encargo, se encontró con que la estructura de la vivienda ya estaba ejecutada y la concepción volumétrica medio definida, sin embargo, el proyecto anterior no convencía plenamente a sus futuros propietarios. El diseño de Manuel García parte del respeto por esa idea inicial y se centra en la materialidad de la misma. “El objetivo es presentar una vivienda eminentemente horizontal, muy compacta y matérica, de revestimientos ejecutados con esmero y detalle. Una sucesión de planos que se superponen como si de estratos se tratase”, declaran desde el estudio de arquitectura. De este modo, los cuerpos que conforman los forjados aparecen como grandes volúmenes apoyados sobre el prisma principal del conjunto. En él no hay barandillas, sino que son estos elementos quienes absorben dicha protección. El llagueado de las piezas porcelánicas de toda la fachada potencia esta idea. La formación de la entrada, los peldaños del acceso o, interiormente, la propia escalera, responden a este mismo planteamiento. Los escalones aparecen volados, de nuevo sin barandilla. Tan sólo una sucesión de planos horizontales que se suceden hasta llegar a los dormitorios. DISCRETOS EXTERIORES PENSADOS PARA EL DISFRUTE La parcela, de ajustadas dimensiones, está pensada para el disfrute y la facilidad de su mantenimiento. Debido a la climatología de la zona, la planta baja se abre al exterior para aprovechar los suaves inviernos, y los abundantes días soleados. Mientras que, en la planta superior, los dormitorios se vuelcan a la terraza descubierta que rodea este nivel. El uso limitado del agua, tan carente en toda la provincia, se refleja en el uso puntual de la vegetación, haciéndose eco de la responsabilidad medioambiental que se respira en toda la comarca. Detalle de volúmenes que actúan de barandillas en su ausencia. En el interior de esta residencia, la ausencia de barandillas también queda de manifiesto en la escalera de comunica la planta baja con la zona privativa, donde los peldaños parece que estén suspendidos en el aire.
RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx