AFL - Arquitectura en Fachadas Ligeras_AF40

ENTREVISTA El último proceso de investigación en el que hemos traba- jado es el del funicular del Tibidabo, la ‘Cuca de Llum’, una colaboración con la ingeniería Leitner, responsable de la Noria de Londres. Tuvimos con ellos gran empatía y lo hemos diseñado todo. Es un tren totalmente panorámico, con un techo totalmente de vidrio; cuando se baja en él desde el Tibidabo, se ve toda Barcelona. Con colaboraciones de este tipo queremos explicar cómo los arquitectos tenemos algo que decir también en el mundo de la ingeniería. Hacemos arquitectura, pero cuando tenemos la oportunidad de diseñar una máquina y de entender cómo funcionan los organismos interiores, como por ejemplo este tren, es algo que tam- bién nos apasiona. Tuvimos que implicarnos a fondo para cambiar los sistemas de refrigeración, integrar en el suelo los paneles de control… Este tren que ha resultado es todo un lujo, todo está muy bien diseñado, pensado y ejecutado. ¿Qué relación se establece entre la industria, la arqui- tectura y la ingeniería? Es básico conseguir alianzas con la industria. Mi docencia en Londres se fundamenta en localizar una industria y desarro- llar con mis alumnos soluciones para los problemas técnicos que ésta pueda tener. Es diferente a cómo se plantean estas cuestiones aquí en las escuelas de arquitectura, con una manera más de enunciado académico, que puede gus- tar más o menos, pero que más allá del procedimiento académico, no tiene mayor responsabilidad. En Londres asumimos cierta responsabilidad. Cuando Airbus contrató a mi grupo de investigación para trabajar sobre la aerodi- námica de las alas, no podíamos perder el tiempo. A mí esta vinculación con la industria me interesa mucho y en el panorama actual, eso aquí aún no existe. Creo que nuestro trabajo cada vez más ha de tener este compromiso con la tecnología y la innovación. La arquitectura acabará teniendo un resultado mucho más formal ligado a estos conceptos de sostenibilidado de mundo digital, pero lo que más me interesa es todo el camino como procesos que asume un reto tecnológico. A pesar de tener mucha de la habilidad en el desarrollo de las formas, a mí me interesa mucho más el edificio como máquina. Por eso estamos haciendo proyectos tan diversos: hemos hecho vivienda para el Institut Municipal de l’Habitatge i Rehabilitación de Barcelona (IMHAB), el tren del Tibidabo o hemos diseñado la atracción del Embruixabruixes, también para este parque de atracciones, a la que hemos dado una nueva orientación gracias a la tecnología digital. Me considero creativo y curioso. Yo soy un curioso que está atento a todo. Me interesa todo. Cuando visito Vidresif, Tecnyconta, iGuzzini, HP u otras empresas vinculadas a nosotros, me interesa ver cómo trabajan, las máquinas que emplean, sus recursos tec- nológicos aplicados a la producción. iGuzzini, cuya sede es obra de Josep Miàs, es uno de los patrocinadores de la exposición en el DHUB. La Cuca de Llum, uno de los últimos proyectos en los que ha participado Josep Miàs, en colaboración con la ingeniería Leitner. 51 AFL

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