A214 - Maquinaria Agricola

82 CONYUNTURA raciones que demuestran el interés por el sector agroalimentario español y que ponen de relieve la presencia regional de CBRE y el alcance ibérico del área de Agribusiness”. POSICIONAMIENTO DE ESPAÑA A NIVEL EUROPEO E INTERNACIONAL Es más que evidente que tras el crecimiento en las últimas décadas de la inversión institucional en mercados ya muy maduros como Australia y Estados Unidos, “el sur de Europa es una de las pocas zonas del mundo donde se puede invertir en cultivos específicos de frutas y verduras en un entorno atractivo”. Así, Rodríguez asegura que “Iberia es la tercera potencia agroalimentaria de Europa, y junto a Italia ofrecen un tándem único de buena rentabilidad y riesgos soportables”. En España, la relevancia del Agribusiness también se refleja en la proporción de superficie agraria utilizada, “de las que 17 millones de hectáreas son de cultivo (76% dedicado a secano y 24% a regadío), ocupando el segundo lugar en extensión agraria de la Unión Europea”. Dentro de los cultivos más importantes se encuentra el olivar para producción de aceite de oliva, el almendro y los cítricos. Todo apunta -según CBRE- a que en los próximos años el Agribusiness se consolidará como un sector estratégico en Iberia por el clima, la variedad de cultivos, la calidad de sus tierras, su eficiencia en sistemas de regadío y el tamaño de las fincas. Entre las zonas más interesantes para el capital privado y con más actividad son Andalucía, Extremadura, Toledo y el levante en España. Según Héctor Rodríguez, han detectado un aumento de la actividad en los últimos años en Aragón, debido principalmente a la disponibilidad de agua. Por su parte, el Alentejo y Castelo Branco en Portugal. Desde su punto de vista, “los inversores buscan grandes fincas de regadío, aptas para cultivos de alto valor (olivar, frutos secos, frutas tropicales, cítricos, etc). Entre un 20-25% de la superficie agrícola en el mundo es de regadío y produce alrededor del 50% de los alimentos. La Península Ibérica cuenta con más de 4 millones de hectáreas de regadío”. PROFESIONALIZACIÓN DEL SECTOR Y NUEVOS MODELOS DE CULTIVO Sin duda, la sequía es una de las grandes preocupaciones del sector, por eso, los inversores buscan localizaciones donde la disponibilidad de regadío y la seguridad de abastecimiento de agua estén garantizadas. En esta línea, los nuevos modelos de cultivo altamente mecanizados son fundamentales para garantizar la continuidad de las explotaciones agrícolas en términos de rentabilidad, reducción de mano de obra, sostenibilidad y tecnología. Rodríguez afirma que “en los últimos años, el sector se ha profesionalizado hasta facilitar la entrada de inversores institucionales”. Así, “el número de fondos que operan a nivel global en el sector se ha multiplicado por 15 en los últimos 15 años”. Puntualiza que “también se observa un notable crecimiento en los volúmenes de inversión recientes”. Desde 2021, la inversión institucional en el sector agroalimentario español ha crecido un 150%, pasando de los 800 millones de euros registrados en 2021 a los más de 2.000 millones de euros alcanzados en 2023. EL SECTOR BANCARIO Y LAS COOPERATIVAS COMO SOPORTE DE FINANCIACIÓN Según Antonio Luque del Castillo, Sección de Crédito de la cooperativa DCOOP, las necesidades de financiación del sector por parte de los propietarios de explotaciones, si nos referimos a la tierra, “existe una casuística muy grande y puede que haya nuevos agricultores o productores que quieran ampliar o transformar su explotación”, lo que les hace recurrir a préstamos hipotecarios “soliéndose intentar negociar años de carencia”. En lo que se refiere a la financiación de las producciones, “en nuestro caso solemos ir haciendo entregas a cuenta por la producción a las cooperativas, para que éstas atiendan a los cooperativistas y puedan hacer frente a los gastos de campaña, dándole la posibilidad de financiarse en la campaña con unos intereses lo más bajos posibles”. Asimismo, se está produciendo cierta evolución por parte de las entidades financieras a las nuevas demandas de agricultores, pues “suelen tener productos específicos para el sector agrario”, aunque “hay algunas de ellas más centradas históricamente en el campo”. En este sentido, también se percibe cierta evolución por parte de los profesionales del campo, que tienden a ser más conscientes de que la financiación es un elemento muy importante en su explotación. En el caso concreto de las cooperativas, es una realidad que cada vez ofrecen más servicios a sus socios, “entre los que se encuentran la posibilidad de acceder a productos financieros con unas condiciones ventajosas dentro de unos límites”. Dcoop, al tratarse de una cooperativa de segundo grado Antonio Luque del Castillo, Sección de Crédito de DCOOP.

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