61 FERIAS 60-80, supusieron un espectacular crecimiento, y los 80, los de la consolidación de un programa complementario de jornadas técnicas, concursos de innovación o la integración de otros sectores. Nuevos emplazamientos, infraestructuras y un concienzudo trabajo por la profesionalización, han sido, sin duda, las claves de estar hoy donde estamos, con cerca de 300 expositores y una estimación de 150.000 visitantes. Han diseñado para la ocasión un cartel del emblemático aniversario y el logotipo. ¿Qué han pretendido simbolizar con ellos? La imagen gráfica de consumar 150 ediciones tenía que visibilizar este siglo y medio, optándose porque el número de la convocatoria protagonizara el cartel. Por otro lado, se buscaba recoger el testimonio de todos estos años como certamen dirigido al sector agrario y se incluyó un campo labrado y una máquina trabajando la tierra. La imagen incorpora las muescas de las ruedas, con unos círculos tanto en el cartel como en el logotipo. Después de que en 2022 se pudiera celebrar con cifras próximas a los años previos a la pandemia, ¿puede ser esta edición de 2023 la de la consolidación definitiva? El impacto de la pandemia para la Fira de Sant Josep en el 2020 fue enorme. Ya estaba todo preparado. Después, la imprevisible situación sanitaria y la prohibición de la actividad ferial, complicaron el contexto. Fira de Mollerussa intentó reprogramar su calendario y, en el 2021, se apostó por hacer la feria en junio para que pudiera celebrarse. El 2022 la feria recuperó su fecha a principios de la primavera, una de las bazas más importantes, pero aún sin el Aplec de Jóvenes del Campo o la Bolsa Interpirenaica de Cereales. Este 2023 la feria se presenta no solo con la recuperación de estos dos puntales, sino también con todo su esplendor y dando un paso más con la remodelación de los espacios feriales. ¿Quédatos puedeofrecer sobre los expositores (número, perfil, % por sectores, etc.) y superficie ocupada? Desde los años 70 la cifra de expositores supera los 200, dígito del que no se ha bajado, rozando, en muchas ediciones, los 300. En 2019, fueron 294. Después de este paréntesis, la Fira de Sant Josep celebrará su 150ª edición absolutamente recuperada y con propuestas para ser de nuevo cita ineludible. Respecto a la exposición: el nuevo sector Ronda Ponent, con los concesionarios de tractores y la maquinaria agrícola; los sectores A y B, con complementos para la agricultura y ganadería, maquinaria industrial, camiones, motores, etc.; el sector C, dedicado a la alimentación; los tres pabellones feriales, con semillas, forrajes, fitosanitarios, piensos, productos comerciales diversos, e instituciones, todos ellos están con una ocupación similar a ediciones anteriores. Destacar el alto nivel de fidelización. Un dato: el 81% de los expositores del 2019 manifestaron su intención de participar el siguiente año. Paralelamente, el certamen recibe sobre un 15% de nuevas inscripciones cada año, cifra que asegura su futuro. ¿Confíanen superar los 138.000asistentes de 2022? ¿Qué acciones han organizado para tratar de conseguirlo? Es un certamen abierto, por lo que disponemos de estimaciones a través de extrapolación de datos. Estos estudios, que datan del 1996, nos indican un volumen de visitantes de entre 133.150, como cifra más baja el 2044, a los 222.544 del 2003. El año pasado fueron 138.000 visitantes. ¿Este año? Esperamos superar. Recuperar todas las actividades, las novedades y el reclamo del 150 aniversario, creemos son elementos que sumarán. ¿Qué asuntos de interés para el sector tienen previsto abordar en el programa de Jornadas Técnicas? Este año se recuperan totalmente con la 20ª Bolsa Interpirenaica de Cereales, con operadores del estado español, de países europeos y alguno de americano, y el Encuentro de Jóvenes del Campo, que sitúa Mollerussa como capital de debate sobre el relevo generacional. Superar los 138.000 visitantes de la edición anterior es uno de los objetivos de este año. Foto: Eduard Molina.
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