CABFishMAN: navegando hacia el crecimiento azul de las flotas de pequeña escala
El centro tecnológico Azti lidera el proyecto internacional CABFishMAN con el reto de mejorar la protección del medio marino y de los recursos pesqueros de la zona Atlántica (UE), a partir de la aplicación de una aproximación ecosistémica a la gestión de las flotas de pequeña escala. Además de cuantificar el crecimiento y el tejido económico de las flotas de pequeña escala, la iniciativa busca también avanzar hacia un crecimiento sostenible (crecimiento azul) aportando nuevo conocimiento y herramientas que ayudarán en la identificación y futura reducción de sus impactos ambientales y efectos del cambio climático.
El consumo global anual de pescado fue de 20,5 kg por persona en 2020, un nivel récord que se espera que aumente en los próximos diez años, según los expertos. Las pesquerías de pequeña escala también contribuyen a satisfacer las necesidades de nutrición de la población generando en el Atlántico más de seiscientos millones de euros de valor añadido. Pero, además, proporcionan otros servicios ecosistémicos culturales con numerosas manifestaciones a lo largo de las regiones costeras Atlánticas (más de un millar de elementos culturales materiales e inmateriales, tales como, eventos, fiestas gastronómicas, rituales, el buen saber hacer de los pescadores, entre otros.). Estos servicios culturales también se traducen en beneficios a la población tales como el bienestar en términos de salud y disfrute.
CABFishMAN está financiando por el Programa Interreg Área Atlántica e incluye 28 socios de los cinco países del Área Atlántica que estudian de forma transnacional e integrada este área .
Sin embargo, el desarrollo de esta actividad también incide de forma negativa en ciertos servicios ecosistémicos de regulación y contribuye a la sobreexplotación de los recursos marinos. Así mismo, la contaminación asociada a estas actividades pesqueras está degradando en cierta medida la condición de los ecosistemas marinos (degradación de los fondos, basura marina, ruido submarino, capturas accesorias…). A ello se suma el cambio climático como una fuente añadida de presión, ya que el consumo de combustible de estas flotas de pequeña escala genera importantes emisiones de CO2 en el Atlántico.
La sostenibilidad, factor clave para la gestión pesquera
En este contexto, CABFishMAN pretende poner en valor la importancia de la sostenibilidad en todo el sector de la pesca a pequeña escala y en los numerosos agentes que facilitan la gestión de esta pesca en los caladeros Atlánticos. El proyecto está desarrollando nuevo conocimiento e innovadoras herramientas comunes y de referencia que contribuyan al desarrollo económico sostenible de estas pesquerías como base para asegurar el mantenimiento a largo plazo de los mencionados beneficios a la sociedad en su conjunto al tiempo que se preserva la biodiversidad marina.
El proyecto pretende conseguir efectos rápidos a corto plazo, dada la urgente necesidad de clarificar cuál es el impacto de estas flotas en el medio marino, cuáles son y cuánto aportan económicamente los servicios ecosistémicos que proveen, así como cuáles son los patrones espaciales de comportamiento de la actividad. Para ello, se está trabajando en el desarrollo de nuevas herramientas y metodologías que contribuyan a cambiar la gestión actual de las pesquerías hacia una gestión ecosistémica en la zona europea atlántica. “Bajo este enfoque, tenemos en cuenta no sólo el recurso pesquero explotado, sino también los impactos de la actividad en el medio marino, la evaluación de los servicios ecosistémicos o el impacto del cambio climático, entre otros”, explica Arantza Murillas, experta de Azti en economía marítima y evaluación monetaria de los servicios ecosistémicos.
Nueva herramienta Geotool accesible para cualquier usuario del sector pesquero
Hasta la fecha, en el marco del proyecto se ha desarrollado una matriz de impactos físicos, ecológicos y pesqueros asociados a las principales tecnologías pesqueras empleadas por estas flotas y, se ha llevado a cabo una evaluación del valor económico derivado del servicio de provisión de alimento que generan las pesquerías en los distintos caladeros del Atlántico.
CABFishMAN también ha inventariado los elementos culturales más relevantes y elaborado una herramienta común para su evaluación en términos económicos. Se ha generado nuevo conocimiento en relación con la distribución espacial del esfuerzo de pesca en todo el Arco Atlántico, inventariándose las herramientas principales utilizadas por los distintos países para la recopilación de estos datos espaciales. Todo ello será integrado en la denominada Geotool CABFishMAN que estará muy pronto accesible en internet para que cualquier agente pueda visualizar y descargar mapas con la información bio-económica y ambiental descrita para toda el área Atlántica.
Aportaciones a corto plazo a las Estrategias Europeas
El proyecto espera contribuir a la Estrategia de Biodiversidad de la Unión Europea, a través de la evaluación económica de los servicios de los ecosistemas, tales como los servicios de provisión y culturales. Contribuir además a la estrategia de crecimiento azul y, ampliar el conocimiento sobre los impactos de las pesquerías de pequeña escala en el medio ambiente que permitirá dar respuesta a los requerimientos de la Directiva MSFD (Directiva Marco sobre la Estrategia Marina, en terminología inglesa).
“Los nuevos datos y métodos serán útiles para los gestores a la hora de enfrentarse a los retos de la Estrategia Marítima para la Zona del Océano Atlántico, tales como la aplicación de un enfoque ecosistémico de las pesquerías de pequeña escala, el conocimiento y posible reducción de la huella de carbono generada. Estas importantes contribuciones se espera que puedan tener efectos en los próximos 5 a 10 años”, concluye Arantza Murillas.