Danosa crea el ‘Mapa 360º del hazlo tu mismo en el hogar’ con las soluciones más idóneas para cada zona de la vivienda
Los españoles gastan 57 €/año en reparaciones en su hogar
El ‘Do It Yourself’ (DIY) o ‘hazlo tú mismo’ se va imponiendo en diversos ámbitos, que van desde la confección de ropa y complementos a la decoración e incluso la reparación del hogar. Tanto es así que los españoles gastan en estas tareas una media cercana a los 57 euros al año, según los datos de la Asociación Nacional de Distribuidores Cerámica y Materiales de Construcción (Andimac) recogidos por Danosa, especialista en soluciones integrales para la construcción sostenible.
Si bien este gasto se ha reducido algo más del 6% en el último año respecto al anterior, si echamos la vista atrás vemos que la bajada es más acusada en comparación con hace casi diez años, pues en 2006 el gasto en DIY de los hogares era de 84,39 euros, es decir, se ha producido un descenso de más del 40%.
De este modo se puede observar cómo tras unos años de ‘boom’ del ‘hazlo tú mismo’ en el hogar (coincidiendo con la crisis económica), el gasto va estabilizándose en una horquilla más baja. Si bien no pierde fuelle, ya que muchas familias apuestan por hacer ellas mismas pequeños arreglos con el objetivo de ahorrar y de dar un toque más personal a sus viviendas.
Por ello, y con motivo de Rehabitar Madrid, Danosa ha elaborado un 'Mapa 360º del ‘hazlo tú mismo’ en el mantenimiento del hogar’, con las soluciones más idóneas para solucionar las deficiencias más frecuentes que suelen aparecer en las diferentes estancias o partes de los hogares fruto del paso del tiempo o por inclemencias meteorológicas.
Reformas para un hogar más eficiente
El denominador común de estos sistemas es que los pueden aplicar los propios usuarios de forma sencilla, no es necesario realizar una gran obra y son eficaces y duraderos. Además de tener un componente sostenible, pues el futuro de la construcción pasa sí o sí por la sostenibilidad con productos y sistemas que eviten el derroche de energía de los hogares, los verdaderos depredadores energéticos del país.
Para las zonas húmedas de la casa, como pueden ser el sótano o el garaje, y para los balcones y zonas a la intemperie, Danosa recomienda utilizar un sistema impermeabilizante que se adhiera al soporte, de forma que evite la aparición de fisuras por las que se cuele el agua y la humedad. Un procedimiento que hay que realizar también en las piscinas, pues aunque no lo parezca estas estructuras también requieren estos procedimientos para evitar que se escape el agua y se produzcan inundaciones. Las humedades también suelen atacar a las zonas más sombrías de las fachadas, originando la aparición de manchas, moho y microorganismos. En este caso, lo más adecuado es utilizar un sistema repelente al agua, a los aceites y las grasas que forme un ‘efecto perla’ para proteger los materiales porosos en fachadas y pavimento.
En el caso de las cocinas y baños, es fundamental impermeabilizar las zonas más sensibles con soluciones con elevada adherencia al soporte, incluso si está húmedo. En cuanto a las cubiertas y tejados, Danosa recomienda un sistema con doble acción que además de impermeabilizar la cubierta la proteja de los rayos UV. De este modo, a la vez que libra de humedades, protege las cubiertas de los rayos de sol en verano, aislando la vivienda y manteniéndola fresca sin necesidad de ventilación especial.
Por último, en el ámbito del aislamiento acústico, Danosa recomienda dos sistemas diferentes para problemas diferentes. Con el objetivo de evitar que los vecinos del piso de abajo escuchen nuestras pisadas o los objetos que se nos caen al suelo –o para nuestra propia casa si tiene varias plantas–, aconseja emplear un sistema de aislamiento acústico capaz de reducir los ruidos de impacto a la mitad —entre los 18 y los 22 decibelios—. Por otra parte, también se puede silenciar el murmullo constante de las bajantes del baño reduciéndolo a casi la mitad con productos de DIY.