Naturaleza del riesgo eléctrico y de la normativa aplicable a los Equipos de Protección Individual (EPI) usados en este ámbito
Equipos de protección individual frente al riesgo eléctrico: características y normativa aplicable
Foto: Linde, planta de Aschaffenburg.
Hoy hablaremos de uno de estos riesgos, y dedicaremos esta entrada a tratar acerca de la naturaleza del riesgo eléctrico y de la normativa aplicable a los Equipos de Protección Individual (EPI) que suelen utilizarse en este ámbito.
Cuando hablamos de riesgo eléctrico, solemos pensar únicamente en los riesgos derivados del paso de corriente a través del cuerpo del trabajador. Sin embargo, el riesgo eléctrico supone un enfoque mucho más amplio que debemos tener en cuenta a la hora de planificar las actividades preventivas. Los riesgos que debemos considerar son:
- Electrocución. Supone el contacto con un elemento en tensión. Se deberán tomar medidas para evitar el paso de corriente eléctrica a través del cuerpo del trabajador.
- Quemaduras. Como consecuencia de un arco eléctrico provocado por un cortocircuito, el trabajador se expone a un nivel de energía térmica tal que puede provocarle quemaduras de consideración.
Los estudios y guías asociadas a la seguridad eléctrica, establecen la necesidad de evaluar el riesgo asociado al arco eléctrico en instalaciones donde existan tensiones superiores a 250 V.
- Explosión. La acumulación de cargas electrostáticas puede originar una chispa que, en caso de trabajar en atmósferas explosivas, puede dar lugar a una explosión.
- Otros riesgos. En este grupo, generalmente se incluyen los riesgos asociados a un arco eléctrico, como pueden ser ondas de choque, gases, radiaciones electromagnéticas, etc.
A continuación, detallaremos los distintos tipos de equipos de protección individual que se asocian a este tipo de trabajos y la normativa que se les aplica.
Protección de la cabeza
La protección de la cabeza del usuario suele estar asociada a la protección de esta parte del cuerpo contra choques o impactos. No obstante, en el ámbito eléctrico la protección de la cabeza debe destinarse también a evitar el paso de corriente a través del cuerpo del usuario entrando por la cabeza.
Distinguimos dos tipos de equipos, asociados a dos ámbitos totalmente diferentes, con diferentes normas aplicables:
Protección facial
Vestuario de protección
Por ello, este tipo de ropa suele evaluarse según la norma de protección contra calor y llamas: EN ISO 11612:2015, a la que adicionalmente se le somete a los ensayos previstos en la norma IEC 61482-2:2009; norma ésta que pese a no ser armonizada, está específicamente destinada a la ropa de protección contra los efectos térmicos del arco eléctrico. Esta última norma, evalúa las prestaciones térmicas de la prenda frente al arco eléctrico mediante dos ensayos.
La información que dan los resultados de cada uno de estos ensayos, es complementaria a la hora de evaluar las propiedades de una prenda o un tejido frente a la exposición de un arco eléctrico de cortocircuito.
- El ensayo de arco abierto según EN ISO 61482-1-1 proporciona un valor ATPV que mide la capacidad de un material o prenda para atenuar la energía térmica incidente como consecuencia de una exposición a un arco eléctrico. En este ensayo, las muestras se someten a un arco eléctrico abierto (no se constriñe de ningún modo) con una intensidad de corriente de 8 kA. El valor ATPV es el valor de energía incidente al cual la transferencia de calor a través de la muestra de ensayo tiene un 50% de probabilidades de provocar quemaduras de segundo grado en la piel del usuario (sin que se produzca rotura del tejido).
Por su parte, el valor EBT es la energía incidente a la cual la rotura de la muestra (tejido o prenda) puede producirse con un 50% de probabilidades.
- En ensayo de la caja según EN ISO 61482-1-2 evalúa el comportamiento de una prenda o material al ser sometido a un arco eléctrico constreñido y dirigido por una caja que hace que toda la energía térmica incidente se proyecte sobre la muestra. En este ensayo, se hacen pruebas a dos intensidades de corriente diferentes, las cuales servirán para clasificar las prendas o tejidos en Clase 1 o Clase 2. Los ensayos para la Clase 1 se hacen a 4 kA y para la Clase 2 se hacen a 7 kA. En este ensayo, se evalúa que las muestras no ardan (más de 5 s), que no formen agujero mayor de 5 mm, que no fundan hasta la capa más interna; y en el caso de ensayo sobre materiales, que la energía incidente registrada no supere los valores de la curva de Stoll (curva de energía incidente que, de superar los valores de dicha curva, supone riesgo de quemaduras de 2º grado)
Protección de manos y brazos
En la siguiente tabla, se detallan los requisitos aplicables a los guantes de protección para trabajos eléctricos.
Calzado de protección
Conclusiones
En este artículo se pretendía dar una visión general acerca de la normativa aplicable a los EPI destinados a ser usados frente a los riesgos eléctricos. Sin embargo, y como siempre recordamos, el conocimiento de la normativa sólo es un paso en el proceso de selección del EPI. Así pues, deberemos realizar nuestra selección una vez hayamos evaluado minuciosamente las particularidades de la tarea a realizar y la magnitud del riesgo.
Tampoco queremos dejar pasar la ocasión de recordar a todos los usuarios de equipos de protección individual la importancia crítica que tiene el folleto informativo, ya no sólo para la selección del equipo, sino para su utilización segura por parte de los usuarios.
En este sentido, recordar que la normativa detalla el contenido mínimo de información que debe figurar en el folleto informativo, y que en caso de que esta información no se proporcione íntegramente, o que esté redactada de forma confusa, no proporcionará la información básica de seguridad que el usuario necesita asimilar y comprender para garantizar su integridad física, algo que en cualquier entorno de riesgo es fundamental, pero que en ambientes de trabajo como los que hemos descrito en esta entrada se convierte en algo absolutamente vital.