La caries en los dientes de leche es la principal enfermedad bucodental en la infancia y un problema de salud pública
Higienistas dentales de toda España actualizan sus conocimientos para mejorar la salud bucal de los niños
Aula Dentaid, área formativa de Dentaid, compañía experta en salud bucodental y puntera en la farmacia de esta categoría, finaliza este mes de junio con una veintena de formaciones sobre “Actualización en odontopediatría: Cómo prevenir la enfermedad bucal desde la infancia hasta la adolescencia”, registrando la participación de más de 1.500 profesionales en diferentes ciudades de toda España.
Estas formaciones se han centrado en conocer las características de la cavidad bucal en las diferentes etapas del crecimiento de los niños y los cuidados odontológicos que pueden necesitar en cada fase, cómo prevenir problemas en el desarrollo de la cavidad bucal desde que nacen hasta que han erupcionado todos los dientes permanentes. Además, se han explicado algunas de las diferencias fundamentales y peculiaridades que existen en relación con el tratamiento odontológico del paciente infantil con respecto al adulto, con especial hincapié en el manejo de la conducta del niño en la clínica dental, así como las recomendaciones para la prevención de las distintas patologías bucales.
En materia de salud bucal infantil, durante las sesiones que abordó la falsa creencia de que los dientes de leche no requieren un cuidado temprano, ya que son temporales y acabarán cayéndose. El Dr. Xavier Calvo, medical advisor de Dentaid y odontólogo periodoncista indica que “un cuidado ineficaz de en los dientes de leche trae consecuencias en los dientes definitivos, ya que pueden nacer con caries, mayor riesgo de gingivitis por malposición dental, y acarrear dolores y molestias innecesarias a los niños”.
Aula Dentaid, área formativa de Dentaid, compañía experta en salud bucodental y líder en la farmacia de esta categoría, finaliza este mes de junio con una veintena de formaciones sobre “Actualización en odontopediatría: Cómo prevenir la enfermedad bucal desde la infancia hasta la adolescencia”, registrando la participación de más de 1.500 profesionales en diferentes ciudades de toda España.
Estas formaciones se han centrado en conocer las características de la cavidad bucal en las diferentes etapas del crecimiento de los niños y los cuidados odontológicos que pueden necesitar en cada fase, cómo prevenir problemas en el desarrollo de la cavidad bucal desde que nacen hasta que han erupcionado todos los dientes permanentes. Además, se han explicado algunas de las diferencias fundamentales y peculiaridades que existen en relación con el tratamiento odontológico del paciente infantil con respecto al adulto, con especial hincapié en el manejo de la conducta del niño en la clínica dental, así como las recomendaciones para la prevención de las distintas patologías bucales.
En materia de salud bucal infantil, durante las sesiones que abordó la falsa creencia de que los dientes de leche no requieren un cuidado temprano, ya que son temporales y acabarán cayéndose. El Dr. Xavier Calvo, medical advisor de Dentaid y odontólogo periodoncista indica que “un cuidado ineficaz de en los dientes de leche trae consecuencias en los dientes definitivos, ya que pueden nacer con caries, mayor riesgo de gingivitis por malposición dental, y acarrear dolores y molestias innecesarias a los niños”.
Recomendaciones de higiene bucal infantil
La higiene bucal en los más pequeños debe comenzar desde el nacimiento, primero limpiando las encías y a partir de la salida de los primeros dientes con productos específicos para ellos. La primera visita al odontopediatra se recomienda dentro del primer año, aunque no es hasta más adelante, incluso alrededor de los 6 años, cuando los padres suelen acudir con sus hijos. “Se están perdiendo muchos años de cuidados y prevención en lo referente a la higiene bucal, y sobre todo se están olvidando la importancia de crear un hábito diario en los más pequeño”, afirma el Dr. Calvo. Las revisiones al odontopediatra se deben mantener, sino hay ninguna complicación, al menos una vez al año.