Se presentan los resultados del proyecto TRAM-S para ayudar a implantar las guías de práctica clínica
En medicina, las Guías de Práctica Clínica (GPC) son el instrumento más habitual para comunicar y trasladar las últimas evidencias médicas a la asistencia sanitaria. Sin embargo, las recomendaciones que se recogen en estas guías suelen ser diferentes de un hospital a otro y esto provoca que la asistencia sanitaria no sea homogénea y que el paciente no reciba siempre el tratamiento más eficiente según la evidencia científica.
Con el objetivo de mejorar este problema, hace cuatro años nació el proyecto TRAM-S (TRAslación de resultados de la investigación Médica a la toma de decisiones en Salud), coordinado por la Universitat Oberta de Catalunya y la Universitat de Girona y financiado por el Instituto de Salud Carlos III.
El pasado 16 de marzo se presentaron los resultados de TRAM-S con un acto en el Departament de Salut que contó con la participación del conseller de Salut, Antoni Comín, del director del AQuAS, Antoni Dedeu, y del director general de Biocat, Albert Barberà.
Aparte de trasladar los resultados obtenidos (donde se han documentado las actitudes de los diferentes públicos receptores de las GPC y se han identificado las barreras comunicativas entre ellos), el acto presentó una herramienta digital de diseminación de Guías de Práctica Clínica especialmente diseñada para facilitar pautas y acciones de comunicación adaptadas a los diferentes actores y escenarios del ámbito de la salud.
“Las barreras comunicativas entre la investigación y la asistencia repercuten directamente al paciente y teníamos una asignatura pendiente en este campo. Se ha trazado una estrategia y ahora es necesario que el comportamiento de los diferentes agentes del sector cambie para que el impacto sea real”, valora Albert Barberà, director de Biocat.
El proyecto también ha contado con la participación de la Universitat de Barcelona, la Universitat Ramon Llull, el Consorcio de Atención Primaria de Salud del Eixample y Biocat.