"La excelencia operativa supone transformar las empresas en organizaciones en continuo aprendizaje"
Entrevista a Thomas Friedli, director del Instituto de Gestión Tecnológica de la Universidad de Saint Gallen, Suiza
Redacción Interempresas21/07/2015
Thomas Friedli es profesor docente en el Instituto de Gestión Tecnológica de la Universidad de Saint Gallen (HSG), Suiza, desde el año 2000. Tras graduarse en administración de empresas, escribió su tesis doctoral sobre la gestión de colaboraciones en la Universidad de San Galo. También ha estado a cargo de la formación de un grupo de investigación sobre excelencia operativa (OPEX) para estudiar en profundidad el "camino a la excelencia", así como de la creación de una plataforma informativa y de intercambio de datos gestionada profesionalmente al servicio de reconocidas empresas farmacéuticas.
Thomas Friedli.
La Universidad de Saint Gallen está visitando diversas ciudades del mundo para explicar las ventajas de la excelencia operativa. En colaboración con ISPE España, también ha recalado en Barcelona. ¿Qué motivos le han impulsado a elegir Barcelona?
En 2010, ISPE España me invitó a dar una conferencia, que tuvo lugar en Madrid. Fue una buena oportunidad para formarme una idea sobre la importancia del sector farmacéutico español, y me impresionó la pasión que vi en la gente. Cuando nos planteábamos cuál sería un buen lugar en Europa para celebrar uno de nuestros encuentros nos vino a la mente España, y después Barcelona.
Como director del departamento de gestión de la producción en la Universidad de Saint Gallen, ¿podría explicarnos brevemente en qué aspectos/campos trabaja su departamento? ¿Cómo podrían aplicarse de un modo directo las investigaciones realizadas al mundo de los negocios?
En estos momentos existen cuatro equipos de investigación. En general, tratamos de ayudar a los fabricantes a superar ciertos retos que plantea el panorama empresarial mundial. Uno de los grupos se centra en la optimización de la producción mundial desde una verdadera perspectiva de red, otro analiza la gestión de la complejidad, el tercero se dedica a la profesionalización de los negocios de servicios de los fabricantes y el cuarto a la excelencia operativa, con especial hincapié en el sector farmacéutico. Todas nuestras actividades de investigación se llevan a cabo en estrecha colaboración con empresas industriales, así que puedo afirmar que tienen un impacto directo en los negocios.
También es experto en excelencia operativa (OPEX). ¿Cómo definiría la excelencia operativa en la actualidad? ¿Cuáles son los principales desafíos a los que se enfrenta la industria farmacéutica al respecto?
Para nosotros, la excelencia operativa supone transformar las empresas en organizaciones en continuo aprendizaje. Así, la excelencia sería la gestión equilibrada de los costes, los tiempos y la calidad, que siempre analizamos desde una perspectiva sistémica, teniendo en cuenta no solo las herramientas disponibles, sino también aspectos organizativos y de comportamiento. La excelencia operativa es un viaje que no tiene fin: ese es precisamente el reto. Tienes que mantener el impulso día tras día, mes tras mes, año tras año. Implica verdadero liderazgo, y una de las cuestiones más difíciles es superar las barreras culturales.
¿Cuáles son, en su opinión, los factores de éxito al perseguir la excelencia operativa?
Existen varios factores. Al igual que muchos otros programas estratégicos, es imprescindible contar con el apoyo de los órganos de dirección. Los líderes y los especialistas deben ser las personas más indicadas. También requiere una buena organización, y comprender en profundidad qué significa la excelencia. Enfocar estas iniciativas desde un punto de vista meramente de reducción de costes puede resultar fatal.
¿La excelencia operativa está lo suficientemente extendida? ¿Se comprende bien? ¿Qué aspectos de esta disciplina especializada destacaría por su relevancia respecto a los procesos farmacéuticos?
A menudo observamos que se necesita tiempo para que todo el mundo entienda y asimile la idea, aunque ese debería ser el objetivo. Hoy en día, en las empresas más avanzadas se dirigen algunos esfuerzos a la alta dirección para tratar de mejorar su grado de comprensión y así lograr que se implique en los esfuerzos necesarios. Dicho esto, cada vez hay más cargos que participan en la excelencia operativa. También vemos más y más organismos de calidad que se preocupan por la excelencia operativa. Hemos sido testigos de algunas iniciativas de excelencia operativa en estudios clínicos, y algunas de ellas han llegado incluso al nivel de I+D. Y es que, en definitiva, la excelencia operativa debe convertirse en la forma de trabajar día a día, ya que es la única manera de implantarla de forma sostenible.
Por último, ¿qué espera de su visita a Barcelona?
Esperamos poder motivar a los participantes para que cuando regresen a sus trabajos inicien con pasión el camino hacia la excelencia.