Ainia organiza una jornada sobre ‘Residuos de medicamentos veterinarios en alimentos de origen animal’
6 de octubre de 2014
Ainia Centro Tecnológico organizó recientemente una jornada en Madrid sobre ‘Residuos de medicamentos veterinarios en alimentos de origen animal’. En ella, Jesús Martín Ruiz, jefe de Área de la Unidad de Coordinación de Alertas y Programación del Control Oficial Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, destacó la complejidad de los controles de las inspecciones veterinarias y el análisis de vigilancia. Y matizó que “actualmente se están intensificando los controles en torno a aquellos puntos geográficos donde se ha detectado positivos en años anteriores”.
Por su parte, Froilán Vázquez, director del Área Funcional de Sanidad y Política (PIF Valencia), hizo referencia a “la evolución de la problemática de los residuos medicamentos en el sector cárnico. Remarcando que la normativa de EE UU es más permisiva que la de Europa en el uso de medicamentos veterinarios en animales e incluso en otras sustancias como las hormonas (en Europa totalmente prohibidas).
Patricia Muñoz, CNA-Aecosan, comentó que: “en ocasiones encontramos residuos de sustancias prohibidas cuyo origen no es intencionado si no que puede ser originado, en algunos casos, por causas naturales del propio animal (ejemplo, los niveles de hormonas no normales debidas a que el animal ha padecido estrés) o incluso en el ámbito ambiental (por ejemplo, ocasionados por la secreción de hongos de forma natural en los piensos. José María Ferrer, jefe del departamento de Legislación de Ainia, avanzó que en breve habrá una nueva reglamentación europea sobre residuos alimentarios en especies menores. Por último, Isabel Berruga, de la Universidad de Castilla-La Mancha, analizó las pruebas de diagnóstico rápido para la detección de antibióticos en la leche a la entrada de las industrias lácteas.
Almudena de Arriba Hervás, jefa de Área de Gestión y Coordinación de la Subdirección General de Sanidad Exterior, del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, afirmó de que el problema de la unión aduanera en Rusia de productos alimenticios como el cárnico “es un veto político comercial, no técnico”. De Arriba analizó los controles de exportación e importación, destacando la importancia del Tracex, el sistema que conecta los puestos de inspección fronteriza en la Unión Europea. Un sistema que, por ejemplo, si en Valencia se detecta un positivo de un producto importado de un país, inmediatamente se informa a todos los puestos fronterizos de la UE. Además, subrayó “la práctica actual de reforzar los controles a aquellas empresas en las que se haya detectado en algún punto de las aduanas de la UE una anomalía en su producto”.
En relación a los desafíos en el control analítico de los residuos veterinarios, Begoña Company, del departamento de Análisis Químico de Ainia Centro Tecnológico, destacó tres retos clave en el control analítico: dar máxima cobertura en los parámetros incluidos en Plan Nacional de Investigación de Residuos (PNIR); disminuir los tiempos en la entrega de resultados de control analítico para, en el caso de haber una partida con problema, se elimine antes de que salga a la venta y afecte al consumidor, y utilizar los métodos oficiales para evitar falsos positivos y negativos. Company resaltó además que el desafío pasa por encontrar un método analítico multiresiduos, es decir, que sea capaz de analizar muchos residuos a la vez, lo que supone agilizar la entrega de resultados. En este sentido, adelantó como en Ainia Centro Tecnológico las técnicas basadas en cromatografía son las que están siendo más estudiadas y perfeccionadas para tal fin.