Los aislantes de lanas minerales ofrecen una mayor protección y seguridad frente a incendios en edificios
Un 78% de los incendios indemnizados que se producen en España son en hogares: una media de 54 al día en España en 2019. A esto hay que añadir otro 8% que se produce en las zonas comunes de las comunidades propietarios, además de los incendios en comercios, que son otro 8%, y los producidos en industrias, un 5%.
Que los hogares estén primeros en el ranking se debe a que se trata de la tipología de edificio más común que suele tener unas elevadas cargas de fuego y, además, que en otro tipo de edificaciones (como fábricas o locales públicos) suelen tener una mayor cultura de prevención contra incendios ya sea por normativas propias o por requisitos de los seguros o de la administración que exigen distintos medios de protección contra el fuego.
Por su naturaleza inorgánica, las lanas minerales son incombustibles (clasificación A1 o A2) incluso a altas temperaturas.
Ante esta realidad, Afelma, la Asociación de Fabricantes Españoles de Lanas Minerales Aislantes, quiere advertir de la importancia de la envolvente del edificio y que un aislamiento de lana mineral contribuye a proteger contra el fuego los elementos constructivos a los que acompaña, además de evitar la propagación en caso de incendio.
Por su naturaleza inorgánica, las lanas minerales son incombustibles (clasificación A1 o A2) incluso a altas temperaturas. Además, no desarrollan ni gases, ni humos asfixiantes o tóxicos que, a la vez, dificultarían la evacuación de los ocupantes de un edificio.
Según explica Oscar del Río, presidente de Afelma “a la hora de construir y rehabilitar edificios, la elección de un material aislante constituye una cuestión de primer orden, por lo que deberá realizarse con conocimiento de sus propiedades técnicas. En este sentido, se debe apostar por materiales que garanticen la protección y seguridad como es el caso de las lanas minerales que, además, son la solución más equilibrada ya que es un producto que consigue tres prestaciones con elevados niveles de aislamiento frente al fuego, aislamiento térmico y aislamiento acústico”.
Aislantes adecuados que garanticen la seguridad
La velocidad de propagación de un incendio depende de la cantidad de material combustible presente, de ahí la importancia de contar con materiales aislantes adecuados que incrementen la seguridad. Por eso, la elección de un buen aislante es fundamental ya que está presente en un gran número de lugares de obra en cantidades muy elevadas. Por ello, es conveniente tener en cuenta que la reacción frente al fuego varía en cada aislante, no solo en lo relativo a la liberación de la energía, sino también en lo que a emisiones de humos y formación de gotas se refiere.
A la hora de llevar a cabo una rehabilitación de la envolvente hay que tener en cuenta la posible degradación de las condiciones de seguridad y protección del edificio, en especial si se trata de edificios en los que pueda haber dificultades de evacuación. En cualquier caso, los usuarios deberían disponer siempre de esta información.