Una flor más, una A menos

Llevamos un año de disgustos con la A. En enero, a España se le rebajó su calificación crediticia y perdió su ‘rating’ 'AAA' debido a que las condiciones económicas y financieras de mercado han destacado debilidades estructurales en la economía española. La triple A, distingue a las naciones más solventes del mundo.

Sigamos con la A:

El virus causante de la actual pandemia de gripe es una cepa A de la familia de los ortomixovirus, a la que también pertenece el virus de la gripe aviar, con la A. Hubo virus en el pasado también relacionados con la A, como la Triple A (nada que ver con la calificación crediticia) y el Equipo A, de la familia de los finalesdelossetenta, a la que también pertenece el virus del destape.

Alucinar, con la A, también debe de ser un virus. Un jugador de fútbol de un país del sur de Europa que viste de blanco es fichado por unos 96 millones de euros. Sólo ese equipo, a finales de junio, había fichado a tres cuatro jugadores por 65, 35 y 15 millones de euros. Total: 211 millones de euros. Sólo ese equipo y sólo con esos cuatro jugadores: 211 millones de euros.

A finales de junio, Estados Unidos había comprado ya vacunas por valor de 206 millones de euros. Estos 206 millones de euros son menos que 211 millones de euros. Fútbol es fútbol, pero euros son euros.

El 2 de julio el Gobierno español hizo público su encargo de 18 millones de dosis de la vacuna contra la gripe A para cubrir a un 40 por ciento de la población. El coste al que apuntaba el consejero delegado de Novartis en declaraciones a la prensa el 16 de junio es de unos 7 euros en grandes pedidos. Es decir, el fichaje de 18 millones de dosis le cuesta a España 126 millones de euros. O sea que menos de la mitad de la población española puede tener una vacuna contra la gripe A por 126 millones. El 100%, por lo tanto, estaría cubierto con 315 millones de euros.

Como todo esto es muy cutre, como algunas indignaciones nos hacen olvidarnos de la pertinaz presencia de una crisis que nos aturulla los sentidos y nos quita una A, en el futuro vamos a intentar traer el “buen rollo” a la industria. No estamos solos en el empeño. Novartis Farmacéutica, la de la vacuna, ha adoptado una filosofía muy ‘happy', reemplazando en sus oficinas equipos ofimáticos por flores. En Barcelona, pasa de 391 equipos a tan solo 81 y lo logra con equipos ofimáticos más modernos y eficientes.

A mí esto, qué quieren, me suena a deceso. Quitamos una impresora, ponemos una flor. Mandamos a un compañero al paro ¿ponemos una flor?