Idili Lizcano: un visionario en el mundo de la belleza natural
La industria de la belleza ha perdido a uno de sus más grandes pioneros. Idili Lizcano, fundador de Alqvimia, nos dejó tras tres años de lucha valiente y decidida. Su legado es un testimonio de pasión, dedicación y una inquebrantable búsqueda de la transformación de la belleza en luz.
Idili Lizcano (DEP), fundador de Alqvimia.
En 1984, Idili fundó Alqvimia en la Garrotxa, en el corazón de los Pirineos de Girona, con un enfoque único: crear cosméticos 100% naturales en plena naturaleza, respetando a la madre tierra. Su filosofía se basaba en la alquimia antigua, combinando tradición y modernidad para elaborar fórmulas con extractos naturales. Cada producto de Alqvimia es una joya terapéutica diseñada para transformar no solo la piel, sino también las emociones y el alma.
Bajo su liderazgo, Alqvimia se expandió internacionalmente, llegando a mercados exigentes como Holanda, Bélgica e Italia, y estableciéndose en veinte países. Su conocimiento filosófico y espiritual se reflejaba en cada frasco, y su dedicación a la calidad era inigualable. En 2003, Alqvimia abrió sus propios espacios Store & Spa en ciudades como Barcelona, Madrid, Girona y Hong Kong, ofreciendo rituales exclusivos en los spas de cadenas hoteleras de renombre mundial como Ritz-Carlton y Marriott.
Drolma Lizcano, actual CEO de Alqvimia, recuerda a su padre con las palabras de Platón que tanto lo inspiraron: “La belleza es un camino ascendente a la luz y ahora él ha alcanzado ese máximo esplendor, brillando su luz más fuerte que nunca desde donde esté”.
Idili Lizcano no solo creó una marca, sino un legado de amor, respeto y dedicación a la belleza natural y a la vida. Su historia de amor con la naturaleza y su visión transformadora continúan iluminando el camino para todos aquellos que creen en la auténtica belleza y en una vida en armonía con el mundo natural. Descanse en paz, Idili. Tu luz seguirá brillando en cada esencia y en cada fórmula que dejaste como legado.