Brillos: ¡Adiós, destellos!
Centrados básicamente en la zona T, los brillos son un preocupante problema cosmético que puede convertirse en un calvario para quien lo sufre. Para solucionarlo, nada mejor que limpiar la piel a diario, tonificarla con lociones astringentes e hidratarla con texturas fluidas y libres de aceites.
A la hora de maquillarla, debemos decantarnos por bases fluidas o compactas, oil-free y con principios activos como el óxido de zinc, que matificarán el resultado final y ayudarán a absorber la grasa de la piel. ¿El truco para mantener la piel perfecta durante toda la jornada? Armarnos de papeles matificantes que, aplicados mediante toquecitos por la zona T, nos ayudarán a mantener los brillos a raya.
Foto: Sara Iglesias