Túneles de lavado en la E.S. Petrem en Figueres, Girona, por Christ

Cuidar los detalles marca la diferencia en casi todas las áreas de la vida, también en los negocios. Y eso es lo que hace en su actividad profesional Pere Caselles, máximo responsable de Petrem, un grupo de empresas cuyas raíces se remontan a 1967 y que en la actualidad cuenta con doce puntos de venta de combustibles. La compañía ha renovado los dos puentes de lavado Christ instalados en su primera estación de servicio antes de que sus prestaciones decayeran.

Cuando los equipos de lavado alcanzan cierta edad y horas de uso, cualquier propietario se enfrenta a la dicotomía de mantenerlos activos y estirar su vida útil o adelantarse y renovarlos antes de que se produzcan las incidencias habituales cuando sus horas de trabajo se cuentan por miles. Caselles optó por esta segunda posibilidad y la excelente acogida que los nuevos puentes Vega de Christ han obtenido entre sus usuarios le ha dado la razón.

Petrem es el ejemplo de una empresa radicada en una zona geográfica que reúne varias de las actividades que habitualmente complementan la comercialización de combustible: distribución de gasóleo; centros de lavado de vehículos; lavanderías… En su búsqueda de ofrecer el mejor servicio a sus clientes, la empresa gerundense ha sustituido los dos puentes Quantus del fabricante alemán suministrados a través de su distribuidor Crielec en 2010, por otras dos unidades de Vega, el galardonado puente del fabricante alemán.

En conversación telefónica, Caselles señala que “somos gasolineros desde hace 55 años. Cuando se produjo la liberalización del sector, en 1992, decidimos ser independientes y crear nuestra propia marca: Petrem. Nuestro ámbito geográfico es exclusivamente la provincia de Gerona y en la actualidad contamos con doce estaciones de servicio que están ubicadas en los alrededores del corredor mediterráneo”, en el que se inscriben la A-7 y la N-II.

“Tenemos estaciones de todo tipo”, prosigue Caselles, quien explica que la empresa está especializada en dar servicio a los profesionales del transporte de mercancías por carretera a través de dos estaciones de servicio, denominadas ‘Petrem Trucks’. En una de estas instalaciones”, destaca nuestro interlocutor, “pueden repostar simultáneamente treinta camiones”.

“La empresa, con el paso de los años y los cambios que se han producido en la sociedad, ha ido evolucionando. Empezamos con tres estaciones de servicio y ahora tenemos doce puntos de venta. Además de Petrem Trucks, tenemos estaciones convencionales, que se engloban bajo el nombre de Petrem; gasolineras desatendidas y automatizadas, que denominamos Petrem Eco (siete de las doce), y un punto de suministro en el puerto deportivo de Roses, que se llama Petrem Mar”, enumera el empresario.

Además, relata Caselles, “tenemos una marca de centros de lavado que se llama ‘Ona Autorentat’. Es una red de centros de boxes de lavado a presión que se ubican en algunas de las doce gasolineras” de la compañía.

En las oficinas centrales de Petrem, ubicadas en la avenida de Vilallonga de Figueres, “tenemos dos puentes de lavado Christ que acabamos de renovar con la participación de Crielec y de Marc Capella. Hemos sustituido los dos anteriores puentes fabricados también por Christ y que ya acumulaban muchos lavados en sus doce años de vida. Hemos renovado con Christ porque estábamos muy contentos con el rendimiento de los anteriores equipos y con el servicio que nos presta Crielec”, subraya el empresario.

A nivel tecnológico, las dos máquinas del fabricante alemán “son muy avanzadas, lo que facilita su explotación y, por tanto, aumenta su rentabilidad”. En la misma estación de servicio hay cinco boxes y una zona de aspiradores, estos últimos también suministrados por la compañía alemana, cuyo máximo responsable en el mercado español es Luis del Valle. “Es un centro de lavado en el que logramos prestar servicio a todo tipo de clientes, porque los usuarios de los boxes y de los túneles son diferentes”, destaca Castelles.

“Christ es una marca alemana y eso nos da seguridad. Además, hemos visto que -en este tiempo, desde 2010 hasta la fecha- ha incorporado a sus equipos tecnologías propias que hacen que el resultado del lavado sea muy bueno”, añade nuestro interlocutor.

“Si en una gasolinera o en una estación de servicio hay espacio suficiente siempre es importante incorporar una zona para ofrecer el lavado de vehículos a los clientes. En mi opinión, diversificar los ingresos es muy importante, más aún en los tiempos que corren. Lo mismo sucede con las tiendas o con las lavanderías automáticas, que en los últimos años están proliferando en ciudades y áreas comerciales, así como en estaciones de servicio”, remarca Caselles.

“En este caso decidimos instalar dos puentes de lavado en paralelo porque creemos que un túnel tiene sentido cuando hay grandes volúmenes de lavado. Y esta es una actividad en la que la demanda es muy discontinua: cuando llueve no se lava y entre semana tampoco hay demasiada actividad. En cambio, los fines de semana o después de que haya llovido barro hay muchos conductores que traen sus vehículos para lavarlos y es en esas ocasiones en las que cobra sentido tener dos túneles. Desde nuestro punto de vista, esta configuración presta un servicio similar al de un túnel, con la ventaja de que si uno de ellos sufre una incidencia inesperada el otro puede seguir atendiendo a los clientes”, explica por teléfono Caselles.

“A pesar de que la inversión necesaria para poner en marcha un puente o un túnel de lavado es más alta que la que requiere un box, su rentabilidad también es superior. En el box cada cliente se gasta la cantidad que considera adecuada teniendo en cuenta la suciedad de su vehículo, mientras que en una máquina son los programas los que marcan la inversión que realiza cada conductor”, apunta el empresario.

Esta área de lavado se encuentra en Figueras, una población que se acerca a los 50.000 habitantes “y en la que el resto de la oferta de lavado automático de vehículos no tiene nada que ver con nuestra propuesta, algo que ya sucedía con los dos equipos de Christ que hemos sustituido y que ahora, con la renovación de ambos puentes, se ha acentuado”, afirma Caselles.

“Cuando hay una máquina nueva, los clientes notan de forma muy clara el cambio, porque la tecnología más moderna logra prestaciones que antes no eran posibles. Es como cuando uno cambia de coche y piensa que para qué cambiarlo, si va bien, pero cuando conduces el nuevo te das cuenta de que va mucho mejor que el anterior. Lo mismo sucede con una máquina de lavado y también con los productos químicos, que cada vez ofrecen mejores resultados. Esto es lo que ha sucedido con el cambio de los dos puentes, ya que los clientes, que antes estaban muy contentos con la calidad del lavado, ahora se muestran aún más entusiastas con el resultado final”.

Petrem cuidado todos los detalles de la instalación.

Marc Capella, de Crielec, enumera algunas de las características de los dos puentes Vega de Christ, el modelo de mayores prestaciones del fabricante alemán. Este modelo, señalan desde Christ, emite muy poco ruido gracias a los eficientes motores-reductores encargados de la translación del equipo. Tal y como sucede con el resto de la gama de puentes de la marca alemana, todo su revestimiento delantero y trasero está realizado en Alunox, material de aluminio con terminación en color gris y serigrafiado, que ofrece “un acabado elegante y duradero”.

Ambos puentes incorporan leds luminosos para frontal y laterales “con altísima resolución y con información clara del proceso de lavado que está realizando el equipo en cada momento”. Además, se ofrece a los usuarios “información luminosa segura para el posicionamiento correcto del vehículo”.

Por otra parte, el giro de los cepillos, tanto en sentido horizontal como vertical, se lleva a cabo por “transmisión directa, logrando así un menor consumo eléctrico, permitiendo la posibilidad de cambiar las revoluciones de giro solo con la programación y ofreciendo”, como se ha apuntado, “un menor nivel sonoro”, informan desde Christ.

Otro de los elementos que colabora en el buen resultado ofrecido por el puente Vega es su barrera de fotocélulas que ‘escanea’ el perfil de cada vehículo, logrando así un lavado preciso y seguro. Esta precisa lectura de la forma de cada vehículo se suma a los cepillos articulados, “que cuentan con una presión de apriete reducida y uniforme para lograr una limpieza más eficiente”, explican fuentes de la marca alemana.

Capella señala que el modelo Vega “es un modelo premium difícil de comparar con equipos de la competencia que no disponen de varias de las características que Christ incorpora a sus puentes de alta gama, como los cepillos articulados o los motores de giro de accionamiento directo, entre otras diferencias”.

Capella añade que Crielec se encarga del “mantenimiento preventivo y de los correctivos (cuando son necesarios), así como del suministro de los distintos productos químicos y consumibles de ambos puentes”. La empresa, que cubre para Christ toda Cataluña y Andorra, “dispone en la actualidad de dos técnicos dedicados exclusivamente al servicio de mantenimiento preventivos y correctivos de equipos” de la marca germana.

Crielec “siempre ha apostado por productos de altísima calidad, ya que -según nuestra experiencia- es la base del éxito de cualquier negocio. Cuantos más servicios de calidad pueda ofrecer una estación de servicio, más ventas cruzadas se realizarán y más rentable será el conjunto. El lavado es uno de los mejores complementos y, en general, no se le otorga la importancia que debería tener. Y si se cuenta con un equipo de calidad, la rentabilidad del negocio será mucho mayor”, remarca Capella.

En este sentido, Caselles mantiene que “en nuestra zona de influencia tenemos una buena presencia, pero frente a las grandes operadoras somos muy pequeños, por lo que siempre apostamos por la calidad y el mejor servicio que podemos prestar a nuestros clientes. Tenemos que enamorar a los clientes que se mueven por nuestra zona de influencia y así fidelizarlos al máximo”.