Un negocio en sí mismo
Esa menor abundancia de equipos de lavado para mascotas es una de las razones del rápido retorno de la inversión que obtienen aquellos negocios que añaden a su oferta de producto el lavado de perros.
Hemos contactado con dos empresarios que han sumado a la oferta de sus respectivas estaciones de servicio sendos equipos de lavado para mascotas de la marca Wasky, uno de las empresas que forman el Grupo Innovaly. El primero de ellos (en estricto orden alfabético) es Javier Bustingorri, propietario del centro de lavado Jai Alai, ubicado en la ciudad madrileña de Coslada (con 81.273 habitantes incluidos en el censo, según os datos de 2021 del Instituto Nacional de Estadística).
La instalación abrió sus puertas el 7 de julio de 1986 como negocio familiar. A lo largo de sus 36 años de actividad, el negocio familiar se ha ido adaptando a las demandas de unos clientes que siguen acudiendo al área de lavado debido a la calidad de los equipos y a la atención que prestan los empleados, que resuelven las dudas e incidencias que se puedan producir y también atienden el túnel de lavado, de veinte metros de longitud.
Con una superficie de cuatro mil metros cuadrados, la instalación está equipada con todo tipo de servicios. Los usuarios tienen a su disposición con doce boxes de lavado con agua caliente generada mediante placas térmicas, que reflejan el compromiso del centro con el medio ambiente. También dispone de catorce aspiradores y el ya mencionado túnel.
La valoración del negocio en Google Maps, un termómetro para muchos potenciales clientes, se sitúa en los 4,4 puntos obre cinco, un notable que roza el sobresaliente, una prueba de la satisfacción de los clientes del área de lavado, un resultado en el que tiene mucho que ver la continua búsqueda nuevos servicios por parte de Bustingorri, quien se define como un amante de los animales. De hecho, explica, “tengo tres perros de gran tamaño, uno de ellos un mastín, y pensé que el lavado de mascotas era una solución ideal y económica para aquellos que, como yo, tienen mascotas y, o bien no disponen de un lugar adecuado para lavar a sus peros, o bien prefieren hacerlo en un espacio amplio y cómodo como son los equipos de Wasky”.
Una vez tomada la decisión de incorporar una cabina de lavado de Wasky a la oferta de Jai Alai, y a pesar de las severas complicaciones que tuvo que afrontar esta nueva actividad como consecuencia de las espectaculares consecuencias generadas por Filomena y la dramática situación provocada por la pandemia de coronavirus, “en ningún momento dudé de que Wasky era la mejor opción para llevar a cabo un proyecto de estas características”.
“Hablar de Wasky es hablar de innovación”
“Hablar de Wasky significa hablar de innovación (…) y no sólo innovación técnica, ya que, además, Wasky se adapta y crece en todos los aspectos: optimiza sus procesos, busca ir un paso por delante, resuelve problemas antes de que surjan, y sobre todo, te hace partícipe de ese proceso para que, como profesional, formes parte del cambio y de las mejoras”.
El empresario destaca “los distintos métodos de pago que ofrece la cabina, la desinfección gratuita y el control remoto de la cabina, que no solo facilitan la experiencia del cliente, sino que hacen que la gestión de la cabina sea muy cómoda”.
“Desde que añadí Wasky a mi negocio he podido reafirmar la importancia que tienen las mascotas para todo tipo de clientes. Son una parte fundamental de su vida, como lo son en la mía, y poder ofrecerles este servicio aporta un valor añadido de gran importancia al negocio, un valor añadido que el cliente valora muy positivamente”, añade nuestro interlocutor.
En cuanto a su consejo a quienes estén valorando la posibilidad de ampliar su área de lavado, Bustingorri “recomendaría sin duda la opción de Wasky como un complemento seguro, original y fiable para crecer. Se trata de un sector en expansión, con muchas oportunidades y con clientes que siguen creciendo día a día. Además, Wasky es la mejor alternativa para estar presente con garantías en este segmento de actividad”.
Más de veinte años de colaboración
El siguiente testimonio es el de Javier Velayos, integrante de una familia que desde 1962 está presente en el mercado de las estaciones de servicio y que en la actualidad cuenta con seis de ellas, cuatro en la Comunidad de Madrid y otras dos en la provincia de Alicante. Una de ellas, la gasolinera de Repsol en la glorieta de Atocha, cuya concesión no fue renovada por el Ayuntamiento de Madrid en junio de 2016, ya contaba en 2001 con dos lavados de mascotas del antiguo modelo diseñado y desarrollado por Grupo Innovaly, que es en el que se basa el actual equipo Wasky.
Javier Velayos, gerente de las estaciones de servicio del Grupo Velayos, recurrió de nuevo a la máquina de lavado para mascotas del fabricante madrileño en la estación de Vicálvaro, barrio situado en el Este de la ciudad de Madrid. El empresario relata que “buscaba diversificar mi negocio y encontrar nuevas sinergias para sacar a mi negocio todo su potencial. Hicimos varias actualizaciones de la estación, modernizando la tienda, añadiendo servicio de paquetería con armarios, cajeros automáticos… y pensé que modernizar el lavado de mascotas sería el toque final perfecto”.
Con esta intervención, el objetivo perseguido era “llegar a más clientes ampliando los servicios de los que disponíamos, pero, además, era importante poder fidelizar a los clientes habituales dándoles un servicio de mayor calidad y con más prestaciones de los que ya contábamos. Wasky revoluciona la idea de lavado de mascotas con la que habíamos trabajado hasta ahora y se adapta perfectamente al cambio que buscábamos”, detalla Velayos.
Pedro S. García junto a Javier Velayos.
Nuestro interlocutor subraya el que considera uno de los puntos más sólidos de Wasky: su equipo humano, que “es el que permite que todas las piezas encajen y que Wasky funcione tan bien como lo hace. Te acompañan en el proceso, crean una relación contigo que va más allá de lo meramente comercial, y siguen a tu lado cada día, asegurándose de que la experiencia y la de tus clientes sea la mejor posible”.
“La implicación, la profesionalidad y el compromiso de la marca son sin duda los puntos fuertes” que de Wasky destaca Velayos, quien apunta que sus clientes “están más satisfechos cada día, y la autonomía que me ha proporcionado este complemento ha hecho aumentar mis ventas sin apenas esfuerzo. También me gustaría destacar la tecnología tan avanzada con la que cuenta la cabina, que aporta muchas facilidades a la hora de gestionar este modelo de negocio. Por ejemplo, las funciones y servicios que pueden controlarse en remoto te permiten tener el control total sobre la máquina estés donde estés”.
“Tengo experiencia en el sector de las estaciones de servicio y, aunque ya era consciente del gran potencial que tiene el lavado de mascotas, (…) Wasky ha abierto nuevas vías para explorar. La experiencia del Grupo Innovaly les ha permitido que crear el mejor producto adaptado a las necesidades del cliente, vigilando detalladamente la experiencia de los intermediarios, como es mi caso. En definitiva, la experiencia ha llevado a Wasky hasta lo más alto, y estoy seguro de que tienen aún mucho camino por recorrer”, declara con entusiasmo.
Velayos concluye afirmando que, “sin ninguna duda, recomiendo Wasky, ni siquiera como una alternativa, sino como una solución única e incomparable con todo lo que hay en el mercado. Dentro de mis planes de futuro está sustituir las demás máquinas de lavado de mascotas con las que ahora cuento en mis diferentes estaciones por autolavados Wasky. Tras los buenos resultados que he logrado los últimos años que he trabajado con ellos tengo muy buenas expectativas y seguiré colaborando con ellos en muchos proyectos”.