El Corredor del Hidrógeno del Ebro potenciará la conexión interterritorial de los proyectos del noreste de la península
El 4 de abril se presentó oficialmente el Corredor del Hidrógeno del Ebro, “un proyecto que busca potenciar la conexión interterritorial y servir como nexo entre las grandes iniciativas regionales en torno al hidrógeno renovable que ya se encuentran en marcha en el noreste de España”. Forman parte de este proyecto el Corredor Vasco del Hidrógeno (BH2C); la Agencia para la Competitividad de la Empresa, como entidad responsable del Valle del Hidrógeno de Cataluña (H2ValleyCat); la Fundación para el Desarrollo de las Nuevas Tecnologías del Hidrógeno en Aragón como responsable de la coordinación del Valle del Hidrógeno de Aragón ‘Iniciativa GetHyGA’, y la Asociación de la Industria de Navarra (AIN) junto con la Sociedad de Desarrollo de Navarra (Sodena) como promotores de la Agenda Navarra del Hidrógeno Verde.
La creación del Corredor del Hidrógeno del Ebro se basa, informaron fuentes de Repsol en una nota de prensa, en “el deseo de compartir información, analizar y estudiar actuaciones complementarias que establezcan sinergias entre las diferentes iniciativas regionales, ha contado con el impulso de Shyne, el mayor consorcio multisectorial de España para el hidrógeno renovable, lanzado el pasado enero, y que juega un papel fundamental como proyecto país por su efecto integrador”.
Shyne, añaden desde la multienergética, “dará soporte a los proyectos que se desarrollen en esta iniciativa, capacidad para la gestión del conocimiento e impulsará la investigación de tecnologías pioneras con el objetivo de posicionar a España a la vanguardia en este vector energético”.
El acto de presentación tuvo lugar en la sede del Gobierno de Aragón y contó con la intervención de la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, quien aseguró que España estará en el centro de la producción de hidrógeno y se llegará a exportar hidrógeno. “La economía del hidrógeno está aquí para quedarse y las apuestas de territorios, empresas e industrias como las vuestras, que están aportando soluciones críticas, hasta el punto de ser capaces de producir hasta el 70 o el 80% de aquello que necesitamos para producir hidrógeno en nuestro país, sabemos que es determinante y muestra el camino a seguir. Por eso, desde el Gobierno hemos incluido un protagonismo especial del hidrógeno en el Perte dedicado a las energías renovables, almacenamiento e hidrógeno verde. Sumar, disponer de corredores que permitan combinar los Valles del Hidrógeno, la capacidad industrial y esos usos finales para testar, ampliar y crecer son absolutamente determinantes”, declaró.
El evento dio comienzo con una intervención del consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, quien apuntó que “por su ubicación, el Corredor del Hidrógeno del Ebro será una palanca clave para desarrollar de forma eficaz todo el potencial de esta área geográfica, con una dimensión transfronteriza de la futura economía de hidrógeno, permitiendo una mayor integración de cadenas de valor a nivel europeo”.
Veinte hidrogeneras en 2025
El Corredor del Hidrógeno del Ebro promoverá acciones en todos los ámbitos, incluida la producción, transporte, usos y almacenamiento. En cuanto a la producción de hidrógeno renovable, este ecosistema se ha marcado “el objetivo de instalar una capacidad de producción de 400 MW en 2025 (lo que conlleva 1,5 GW de producción de generación renovable asociada), y alcanzar 1,5 GW en 2030 (6 GW de renovable)”.
Además, esta iniciativa estimulará los usos finales del hidrógeno renovable, tanto en el sector del transporte como en usos industriales de distintos sectores. “Entre estos usos, destaca el objetivo de alcanzar una producción de 250.000 toneladas anuales de productos derivados del hidrógeno renovable como el metanol, el amoniaco o los combustibles sintéticos en 2030. También impulsará la creación de una red con veinte hidrogeneras en 2025, infraestructura que contará con hasta 100 puntos en 2030, para posibilitar el despliegue de su uso en el transporte terrestre, marítimo y ferroviario”.
Además, por lo que respecta al almacenamiento y transporte de hidrógeno renovable, “se impulsarán proyectos transfronterizos con el sur de Francia para favorecer la interconexión con Europa y posicionar a España como un productor relevante en el mercado del hidrógeno continental. Se realizará de manera coordinada con la Comunidad de Trabajo de los Pirineos”.
Shyne: 3.230 millones de euros de inversión total
El proyecto Shyne, liderado por Repsol, pretende “promover actuaciones interterritoriales y proyectos de hidrógeno renovable en todos los ámbitos de la economía española para fomentar una descarbonización rápida”. De hecho, “desplegará proyectos en diez comunidades autónomas y contará con una inversión total de 3.230 millones de euros que servirá para desarrollar tecnologías más competitivas y evolucionar tanto la industria española como sus infraestructuras hacia la descarbonización, generando más de 13.000 empleos”.
“El hidrógeno renovable es uno de los principales vectores energéticos para alcanzar la descarbonización de la economía gracias principalmente a su versatilidad. Ya se usa hidrógeno en el sector industrial como materia prima en el refino, en la producción de amoniaco, en la industria del acero y en la química, principalmente. Todos estos productos tendrán menos huella de carbono gracias al hidrógeno renovable”, aseguran desde Repsol.
Además, el hidrógeno “es en sí mismo un combustible limpio, en movilidad se utiliza en la producción de combustibles sintéticos o en pilas de combustible y también puede emplearse para almacenar energía renovable solventando así la intermitencia de la producción eólica y solar fotovoltaica. La coordinación entre todas las iniciativas regionales es una pieza fundamental para conseguir un despliegue eficiente de la economía del hidrógeno y a alcanzar los objetivos nacionales y europeos”.