bp Castellón, primera refinería del mundo certificada en la producción de combustible sostenible para aviación internacional
bp Castellón se ha convertido en la primera refinería del mundo en recibir la certificación Corsia (Plan de Compensación y Reducción de Carbono para la Aviación Internacional), que permite a la instalación castellonense coprocesar combustible bajo este estándar, una vez que se concluya el marco normativo y se desarrollen las cadenas de suministro de materias primas. Este certificado está respaldado por la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), organismo dependiente de las Naciones Unidas, con el objetivo de seguir promoviendo el crecimiento sostenible de la aviación civil.
Corsia se convertirá en obligatorio en 2027 para los vuelos de ámbito internacional. Foto: Dustin Hackert.
Emitido por International Sustainability Carbon Certification (ISCC), el certificado Corsia “certifica de manera robusta la incorporación de materias primas biogénicas en el combustible de aviación”, destacaron fuentes de la compañía británica en aun nota de prensa. “Este logro”, añaden desde bp, “entra dentro del objetivo de descarbonización de la refinería por medio del procesamiento de aceites renovables para carburantes bajos en emisiones. Castellón persigue así convertirse en un centro de referencia en la producción física de SAF (combustible de aviación sostenible), anticipándose a los requerimientos de sostenibilidad exigidos por los organismos internacionales”.
2021 marca el punto de partida de Corsia estableciendo un plazo de participación voluntaria, aunque es en el siguiente periodo (2024) cuando se espera que un mayor número de países se adhieran al esquema y se preparen para el salto que tendrá lugar en 2027, cuando se convertirá en obligatorio para los vuelos de ámbito internacional. En total, 81 países (incluidos todos los Estados miembros de la Unión Europea), que representan alrededor del 80% de la aviación internacional, tienen intención de participar en Corsia, lo que implicará que la mayoría de las compañías aéreas deberán adaptarse a este régimen de reducción de emisiones, explicaron las mismas fuentes.
“El sector de la aviación, que actualmente supone alrededor del 2% de las emisiones de carbono producidas por el hombre, tiene el objetivo de reducir a la mitad esas emisiones para 2050 en relación con los niveles de 2005. Y la adopción del SAF es clave para alcanzar esa ambición. Por eso es tan importante que Castellón haya sido el primer centro de producción de SAF del mundo en recibir la certificación Corsia, a la que la mayoría de las aerolíneas van a tener que adherirse en los próximos años para garantizar la sostenibilidad de la aviación civil”, afirma Carlos Barrasa, presidente de bp España.
bp Castellón, centro de producción de energía sostenible
“Con este logro, bp Castellón avanza en su propósito de transformación hacia un centro de producción de energía eficiente de emisiones netas cero en 2050 o antes. En esta línea, bp viene desarrollando programas para incentivar los ecocombustibles, la eficiencia energética, el hidrógeno renovable, y la captura, uso y almacenamiento de carbono (CCUS)”.
El pasado mes de abril, la compañía anunció el desarrollo del mayor proyecto de hidrógeno verde de la Comunidad Valenciana, que se llevará a cabo junto a Iberdrola y Enagás, y que se situará en el centro de producción de Castellón y tendrá una capacidad de electrólisis de 20 MW que, en fases posteriores, podría ampliarse a 115 MW. El proyecto, que supondrá una inversión de 90 millones de euros, podría empezar a operar en 2023.
De esta forma, bp sigue avanzando en sus objetivos de transición a una empresa energética integrada a través de la participación en diferentes esquemas de descarbonización, como Corsia, y de la inversión en la reconversión de unidades tradicionales de refino para la producción de biocombustibles. A nivel global, bp ha establecido el compromiso de reducir su producción de petróleo y gas en un 40% en 2030 con respecto a los niveles de 2019, y la gran ambición de la compañía es alcanzar el nivel de cero emisiones netas en 2050 o con anterioridad, y ayudar al mundo a construir una economía libre de emisiones.