Durante los entrenamientos que tuvieron lugar en el aeródromo de Ocaña, Toledo

Air BP, proveedor internacional de combustibles y servicios para la aviación, fue el suministrador de los entrenamientos de la Red Bull Air Race en el aeródromo de Ocaña, Toledo. Asimismo, Air BP lleva a cabo la compensación de emisiones de carbono de la Red Bull Air Race y de los entrenamientos.

Los entrenamientos de la Red Bull Air Race volvieron a celebrarse en España, en concreto desde el 13 al 17 de mayo. Es la primera ocasión en la que sucede desde que en 2006 tuvo lugar la carrera en Barcelona.

Fuentes de BP explicaron en una nota de prensa que la Red Bull Air Race “es un campeonato aéreo de motor a nivel mundial que exige una combinación de velocidad, precisión y habilidades”. A través de la utilización de aeroplanos de carrera, que destacan por su rapidez, agilidad y alto rendimiento, los pilotos compiten sobre agua y tierra. “Una mayor velocidad, combinada con la baja altitud y maniobras acrobáticas extremas, hace que sea un reto exclusivo para los pilotos más excepcionales del mundo”, describen desde la compañía energética de origen británico.

El campo de entrenamiento está diseñado para poner a prueba a los pilotos de la Clase Challenger, quienes deben demostrar su capacidad ante tal desafío. Para los nuevos pilotos ésta es su primera competición en la que los aviones que pilotan atraviesan una serie de pilones hinchables, el vuelo característico de la Red Bull Air Race, denominado ‘pylon flying’.

El combustible es un factor clave en el éxito del piloto, ya que su optimización es una de las formas en la que un piloto puede elevarse por encima del nivel del terreno de juego, destacan desde BP.

El aeródromo de Ocaña, gestionado por Senasa, tiene como objetivo la realización de actividades de formación, promoción y apoyo a la aviación deportiva en España, además de servir de anfitrión en diferentes eventos y campeonatos internacionales. Gracias a la calidad de sus instalaciones, así como a su la excelencia operativa, es un espacio idóneo para los entrenamientos de Red Bull Air Race y la puesta a punto de sus aparatos. Las instalaciones están dotadas de los mejores medios técnicos y humanos. Air BP colabora con el aeródromo de Ocaña desde hace más de 20 años.

Air BP es la división de aviación de BP y uno de los principales suministradores de combustible y servicios de aviación del mundo. “Hemos invertido en el sector de la aviación durante más de 90 años y en la actualidad suministramos cada año en torno a seis mil quinientos millones de galones de combustible para aviones” (24.570 millones de litros). “Más de 6.000 vuelos diarios son posibles gracias a nuestro repostaje en unos 900 puntos de más de 50 países, lo cual supone más de cuatro vuelos por minuto. Nuestros clientes incluyen aerolíneas comerciales, aviones militares, propietarios de aviones comerciales y privados, operadores de aeropuertos y de aeródromos”, detallan desde la compañía británica.

Los servicios de Air BP engloban el diseño, la construcción y la explotación de instalaciones de repostaje, la asesoría y formación técnica, el apoyo a los clientes para que alcancen sus metas de reducción de la huella de carbono mediante soluciones medioambientales, la ‘Sterling Card’ para el repostaje eficiente de la aviación general y las plataformas digitales innovadoras que incrementan la eficiencia y reducen el riesgo.

En las Red Bull Air Race World catorce pilotos compiten contrarreloj mientras alcanzan velocidades de hasta 370 km/h. Los participantes deben estar en la mejor condición física, ya que soportan fuerzas de hasta 12G mientras sobrevuelan el circuito sorteando pilones rellenos de aire.

El Campeonato Air Race, acreditado por la Fédération Aéronautique Internationale (FAI), nació en 2003, fecha desde la cual se han celebrado más de 90 carreras en los cinco continentes. En 2014 se introdujo el ‘Challenger Cup feeder’, con el objetivo de facilitar el desarrollo de las habilidades únicas requeridas por la ‘Master Class’ para la próxima generación de pilotos.