La espuma Cell Aire, fabricada en polietileno, es la evolución del antiguo plástico de burbujas, ya que ocupa menos espacio, es más económico y cumple las mismas funciones que las burbujas, sin todos los inconvenientes que éstas plantean.
Esta espuma protectora se puede laminar con papel kraft o con un film plástico para darle otras propiedades como rigidez o impermeabilización, por lo que aporta además utilidades extras que mejoran sus prestaciones.
La burbuja a su vez, suele tener el problema de que va perdiendo aire con el tiempo, por lo que pierde consistencia y por tanto es menos útil. La espuma Cell Aire no se deforma con el tiempo, ni pierde resistencia, por lo que tiene una vida útil más larga que el plástico de burbujas.