JCB consigue el mayor contrato de su historia en Brasil
30 de mayo de 2012
Las primeras 114 retrocargadoras de las 1.016 encargadas ya han sido entregadas y la presidenta brasileña Dilma Rousseff, fue la encargada de ofrecer las llaves de una de las primeras máquinas a Cleri Camilotti, alcalde de la ciudad de Três Passos del Estado de Rio Grande do Sul.
El resto de las retrocargadoras 3C (que serán fabricadas en su totalidad en la fábrica de JCB en Sao Paulo, Brasil) serán entregadas a finales de junio. Las máquinas han sido adquiridas por el Gobierno Federal de Brasil para su uso en más de 1.000 municipios del país con poblaciones de más 50.000 habitantes. Su misión será ampliar y mejorar miles de kilómetros de carreteras secundarias en áreas que dependen principalmente de la agricultura, y asegurar así que los alimentos lleguen a su destino de una forma mucho más rápida.
Un tercio de las granjas en Brasil son empresas familiares en zonas remotas del país donde la red de carreteras tiene que ser actualizada; la adquisición de las máquinas JCB es parte de una importante iniciativa de crecimiento del Gobierno Federal. En total, Brasil cuenta con más de 400.000 granjas familiares.
Carlos Hernández, director general de JCB Brasil, comentaba: “Estas máquinas JCB jugarán un papel muy importante en la mejora de las infraestructura de todo el país y además contribuirán a asegurar que la producción de las granjas familiares llegue a su destino rápidamente”.
La presidenta Dilma Rousseff, la primera mujer en ocupar este cargo en la historia de Brasil, declaró: “Las retrocargadoras van a resolver el problema del transporte de mercancías”.
Y el alcalde de Três Passos, Cleri Camilotti, añadía: “Para nosotros, los alcaldes, recibir una retrocargadora tiene el mismo significado e importancia que si nos dieran una casa cuando nos vamos a casar.”
En este contrato de venta, JCB Brasil también se compromete a proporcionar información técnica detallada y facilitar la formación de los operadores en todo el país, que tiene una población de más de 180 millones de personas.