Conteo de personas: más seguridad y más ventas
Rocío Cano, Sales Manager Iberia de Hikvision
19/05/2021En recintos muy pequeños puede resultar fácil controlar el número de personas que se concentran en el interior. Pero en lugares más amplios y, sobre todo, con múltiples entradas y salidas, ese conteo se complica: centros comerciales, mercados, centros de exposiciones, salas de conciertos y espectáculos, grandes superficies…
Controlar el aforo de estos recintos tiene una primera aplicación instantánea: mantener la seguridad de las personas. Las circunstancias actuales demandan la necesidad de establecer límites en el número de personas que pueden permanecer dentro de un perímetro, y la tecnología de conteo permite controlar en tiempo real cuánta gente hay. De esta manera, en el momento en que se llega al límite permitido, se puede tomar la decisión de impedir la entrada de más personas hasta que otras hayan abandonado el lugar. Así se garantiza el cumplimiento de los aforos autorizados.
Lógicamente, el sistema es tanto más complejo cuantos más accesos existan, porque obliga a sumar y restar en tiempo real desde múltiples puntos. Técnicamente es algo que también está resuelto, aunque conlleve cierta complejidad adicional.
La segunda gran aplicación del conteo de personas no es instantánea, sino que se aplica a medio y largo plazo. Se trata del análisis de los datos que aportan las cámaras. El vídeo inteligente permite no sólo hacer la cuenta de personas que entran y salen de un lugar, sino también elaborar estadísticas de cuánta gente acude a un establecimiento a lo largo de un día, cuáles son los momentos de más afluencia o cuáles son las entradas y salidas más utilizadas, lo que ofrece información muy interesante sobre las zonas del interior más frecuentadas por los usuarios.
Con estos datos, los gestores del establecimiento pueden tomar decisiones como reforzar el personal en las horas con más público, realizar un mantenimiento cuando el lugar está más tranquilo o colocar los productos que tenemos más interés en vender en las zonas de más tránsito, si hablamos de un comercio.
Estos beneficios, unos inmediatos y otros a medio plazo, son los que han provocado que se haya disparado la demanda de los sistemas de conteo de personas. La seguridad se ha convertido en una prioridad. Es una manera evidente de mejorar la experiencia del usuario, que disfruta de una manera más despreocupada si sabe que se está controlando el aforo. Y por otro lado, el Big Data que aportan estos sistemas lo pueden aprovechar los gerentes de los establecimientos para mejorar la estrategia comercial, es decir, para conseguir vender más y mejor.
En definitiva, la seguridad y la rentabilidad son dos de los grandes objetivos que persiguen los grandes recintos. Y en el caso de los sistemas de conteo de personas, estos dos beneficios van de la mano.