Durmi y su pérgola bioclimática permiten disfrutar del jardín todo el año
Las pérgolas bioclimáticas de Durmi son un sistema de protección solar que se colocan en el jardín o terraza y se puede recurrir a ellas durante todo el año, incluso en los días más fríos o más calurosos.
A diferencia de las convencionales, estas pérgolas bioclimáticas están creadas a partir de aluminio y lamas orientables. Así, en función de las condiciones meteorológicas, las lamas se pueden abrir o cerrar para conseguir la temperatura deseada.
Ventajas de la pérgola bioclimática
Las pérgolas bioclimáticas de Durmi ofrecen, además, las siguientes ventajas:
- Ventilación: Además de proteger del calor, también permiten ventilar. Regulando la apertura de la pérgola, se puede controlar y dirigir el flujo del aire.
- Resistencia: Las pérgolas de aluminio son totalmente resistentes y firmes. A pesar de las inclemencias meteorológicas, como granizo o lluvia, las pérgolas bioclimáticas Durmi están en condiciones de aguantar durante mucho tiempo en perfectas condiciones.
- Estética: Son 100% estéticas y totalmente personalizables, es decir, pueden ser decoradas a gusto del usuario o incluir accesorios según sus necesidades. Admiten, por ejemplo, añadir iluminación LED para así disfrutar del espacio incluso de noche y, también, persianas, cortinas e incluso vidrio para tener un espacio más cerrado.
- Montaje fácil y sencillo: Se instalan de manera sencilla y sin necesidad de obras interminables. La tornillería no está visible y todos los cables quedan escondidos entre los perfiles.
- Versatilidad: Por último, se pueden instalar en cualquier espacio, tanto en el ámbito particular –jardines, terrazas- como profesional, como terrazas de bares, hostelería o restauración.
Las pérgolas bioclimáticas de Durmi pueden adaptarse a cualquier tipo de necesidad que pueda tener el cliente o usuario. Para ello, tan solo es necesario contactar con los técnicos de la empresa para encontrar la solución que se adapte a cada necesidad concreta.