Entrevista a Juan Manuel Castaño, miembro de la Junta Directiva de la Plataforma PEP, arquitecto certificado por el PassivHaus Institut y experto regional en Edificios de Consumo Casi Nulo de Energía por el programa europeo PASSREG.
Knauf Insulation analiza el standard PassivHaus en España a través de la Plataforma PEP
Los edificios construidos bajo este estándar pueden reducir su consumo energético en un 75%, lo cual proporciona importantes beneficios no sólo al propietario, sino también al medio ambiente. Pero a la hora de ponerlo en práctica los arquitectos encuentran una serie de dudas o falsos mitos y surgen preguntas sobre su transposición en climas mediterráneos y cálidos, como es el caso de España.
Knauf Insulation forma parte de la Plataforma PEP (Plataforma Edificación PassivHaus) y colabora con ellos en proyectos de edificación en los que el objetivo es la optimización de los recursos existentes a través de técnicas pasivas, como puede ser el aislamiento, sector en el que es un referente.
La compañía de aislamiento ha entrevistado a Juan Manuel Castaño Salvador, miembro de la Junta Directiva de la Plataforma PEP, arquitecto certificado por el PassivHaus Institut y experto regional en Edificios de Consumo Casi Nulo de Energía por el programa europeo PASSREG.
Juan Manuel, ¿podrías resumir la adaptación de PassivHaus a España y los aspectos principales que han sido adaptados?
PassivHaus limita las demandas de calefacción y refrigeración. La diferencia con climas muy fríos es que nosotros en el Sur y en el área mediterránea podemos construirlos con espesores de aislamiento de alrededor de 10 cm, sin necesidad de ir a triples vidrios, y en climas fríos como los centroeuropeos para llegar a esas mismas demandas tienen que colocar espesores de alrededor de 25-30 cm y triples vidrios.
Además, los criterios de certificación de componentes constructivos se han adaptado a las exigencias de climas cálidos.
¿Cómo valoraría la implementación del standard en España?
La implementación ha sido gradual, actualmente está en un estado de desarrollo muy interesante. Se ha certificado el primer edificio público en España, la biblioteca pública de Villamediana de Iregua, hay edificios de oficinas certificados, edificios de viviendas plurifamiliares como una promoción pública de más de 300 viviendas en Bilbao (torres Bolueta), en Sevilla está en proyecto un edificio de uso docente de alrededor de 300 m2.
Se puede decir que se ha trascendido de la escala de vivienda unifamiliar, que es como empezó el estándar en España.
Se ha realizado una adaptación a nuestro clima, pero la hermeticidad sigue siendo uno de sus ejes principales, en clima mediterráneo, ¿cómo se argumenta? ¿Cómo evitamos abrir la ventana en un clima mediterráneo?
Tengo el despacho en Sevilla, y este verano pasado a 47º vi muy pocas ventanas abiertas... Las ventanas tienen que poder abrirse, sino no, no se certifica PassivHaus, pero no tenemos la necesidad de abrirlas para ventilar la casa porque el edificio está continuamente ventilado las 24h, con un sistema de ventilación con recuperación de calor.
Cuando la temperatura exterior es amable, en primavera y en el otoño mediterráneo, se pueden tener las ventanas abiertas.
En verano e invierno, cuando nos queremos proteger de temperaturas muy altas o muy bajas, no estamos obligados a abrir las ventanas para ventilar y las casa, y al ser hermética no perdemos energía. Además siendo hermético, evitamos el disconfort que supone, por ejemplo, estar al lado de una ventana cerrada y sentir que entra el aire.
¿Cuál podría decir que es su distintivo frente a las otras certificaciones ambientales?
PassivHaus certifica exclusivamente demanda de energía (de calefacción, refrigeración y energía primaria total) y producción de energía en el edificio con un alto grado de confort. Si el confort está en entredicho el edificio puede no ser certificable.
En el resto de certificaciones ambientales entran en juego otros factores como consumo de agua, ciclo de vida de materiales, etc. Y también ahorro en energía, por eso es una combinación perfecta certificar PasivHaus (con el que conseguimos el máximo ahorro razonable de un edificio) con una certificación ambiental, en la que entran en juego el resto de factores que hacen sostenible a un edificio.