Se trata de una fosa con tres compartimentos. En el primero, se produce una decantación de los sólidos sedimentables y una digestión anaerobia. Por gravedad el agua pasa al segundo compartimento, donde sigue la digestión y se evita el paso de espumas. El agua libre de sólidos entra en el tercer compartimento, el filtro biológico, compuesto por un material con una superficie específica muy elevada, donde los microorganismos aeróbicos se adhieren. El agua atraviesa todo el filtro por gravedad, mientras la flora adherida al relleno del filtro va degradando la materia orgánica disuelta. En este último tanque es necesaria una correcta ventilación por tiro natural. La utilización de un relleno plástico de alto rendimiento en los equipos proporciona una mayor efectividad al proceso.