Banco Viena con reposabrazos: en estilo retro para los entornos más variados. Los reposabrazos y las patas de líneas curvas crean un resultado armonioso y novedoso.
La combinación de hierro forjado y madera es un dúo perfecto para que la línea Viena sea la protagonista de cualquier espacio. Destaca por su diseño idóneo para dar un toque clásico a las zonas urbanas, parques, áreas residenciales, paseos o ramblas.
El asiento y el respaldo constan de 7 tablas de picea noruega, cepilladas, lijadas y secadas.
Las tablas se pintan con pinturas a base de agua mediante pulverización cuatro veces, lo que proporciona una protección muy efectiva contra las condiciones climáticas dañinas en nuestro clima.
Este modelo está diseñado para ser fijado permanentemente a superficies duras mediante cuatro pernos que pasan a través de las patas de las fundiciones de hierro (tacos de expansión - 12 mm, tornillos M8).