Reinnova hace balance de su segunda edición

Ante las dificultades extraordinarias del momento actual y los elevados costes que se derivan de un modelo de gestión de residuos exigente, se impone explorar nuevas vías que mejoren la eficiencia a través de la innovación, la investigación y el diálogo entre el sector público y privado como factores que se tienen que poner en valor sobre los que se debe orientar el modelo.

En este sentido, en Reinnova, las principales líneas que se expusieron fueron las siguientes:

- Se debe promover la obtención, el uso y el mercado de combustible alternativo a partir del rechazo de las plantas de tratamiento.

- El uso de combustible alternativo mitiga las emisiones de efecto invernadero, ahorra combustibles fósiles para generaciones futuras, recupera energía de los residuos, reduce la necesidad de los vertederos y reduce el coste de tratamiento.

- Es necesario ampliar los usos y el mercado del material estabilizado obtenido de las plantas de tratamiento de la fracción resto. Las restricciones impuestas a la nueva ley de residuos limitan su reciclaje a usos marginales.

- Se debe avanzar en la monitorización del funcionamiento de las plantas de tratamiento como factor de eficiencia y de reducción de coste de las mismas.

- Es necesario avanzar en la cuantificación económica de la emisión de gases de efecto invernadero evitadas con una correcta gestión de residuos. Estos importes se deberían traducir en fuentes de financiación destinadas a los responsables directos, ayuntamientos y comunidades autónomas.

- Están emergiendo nuevas perspectivas para la recuperación de residuos. Un proyecto de futuro es el estudio sobre la viabilidad de extraer los recursos enterrados en los antiguos vertederos para su aprovechamiento energético, acogido bajo el concepto ‘Urban mining’. En este sentido, se parte de dos retos claves: la investigación aplicada a la tecnología y las condiciones para la implementación y la investigación teórica de modelos de negocio y factores de organización.

La amplia presencia de representantes de los diferentes países de América Latina ha permitido un intercambio de experiencias basado en la exposición de la situación en relación a la gestión de residuos de cada país, destacando que “hay un largo camino por recorrer”.

Promover el desarrollo del sector de los residuos en mercados emergentes ayuda a reducir costes y a que sea más competitivo. En América Latina hay progresos significativos en la gestión integral de residuos sólidos para el establecimiento de políticas de planificación y legislación. No obstante, el desarrollo se ha dado en grandes ciudades, mientras que el resto se encuentran mucho más atrasadas.

Los aspectos clave recaen en incluir una planificación estratégica a nivel nacional y local buscando la agrupación de localidades, fortaleciendo las instituciones responsables, ampliando la cobertura de actuación e incluyendo la responsabilidad social.

Desde los mercados internacionales se reclama que las soluciones que se presenten se adapten a las condiciones socioeconómicas del país de destino y a las realidades locales de manera sostenible y que contribuyan al desarrollo tecnológico del mismo.

El Centre de Tractament de Residus del Vallès Occidental, ubicado en Vacarisses y que presta sus servicios a toda la comarca, ha sido galardonado dentro del certamen World Architecture Festival 2011 en la categoría ‘Producción, Energía y Reciclaje’. Este galardón de arquitectura supone un reconocimiento internacional a esta planta de tratamiento que, integrada al entorno y bajo criterios de sostenibilidad, da servicio al Vallès Occidental.

El arquitecto del proyecto, Enric Batlle, del despacho de arquitectos Batlle i Roig, asistió a Reinnova con el fin de compartir el galardón con los representantes del consorcio y de los ayuntamientos de la comarca.

Cuando se habla de los sistemas de financiación para el sector residuos se llega a la conclusión de que se dispone de fondos para invertir en países emergentes a través de entidades como el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) o el Instituto Catalán de Finanzas (ICF). Deben existir fondos de financiación adecuados y flexibles a las necesidades de los principales responsables de la ejecución real y efectiva de la gestión integral de los residuos.

El Instituto Catalán de Finanzas (ICF) va a ofrecer su soporte en la transacción a los gobiernos locales y municipales de los mercados emergentes para implementar una colaboración público-privada sostenible que mejore los estándares y promueva un crecimiento económico a largo plazo. Se trata de una responsabilidad compartida entre los gobiernos, el sector privado y el sector financiero.

El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) hizo una radiografía de la situación de los residuos en América Latina, destacando las vastas oportunidades que ofrece la región e instó a las empresas a asociarse para acceder a los fondos disponibles y conseguir financiación para el desarrollo del sector.