TRAM muestra el sistema fotovoltaico de sus talleres a expertos en sostenibilidad
5 de noviembre de 2010
Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) mostró a distintos representantes de las autoridades locales intermedias de la Unión Europea (UE) el sistema fotovoltaico instalado sobre la cubierta de los talleres que TRAM Metropolitano de Alicante tiene en la localidad de El Campello, instalaciones en las que se realiza el mantenimiento y las reparaciones de trenes-TRAM y tranvías.
Los expertos nacionales y extranjeros que integraban la delegación pertenecen al grupo de trabajo de desarrollo territorial de Partenalia, una red de administraciones de nivel intermedio —diputaciones, provincias o regiones— agrupadas en esta organización para impulsar el Pacto de Alcaldes. Este acuerdo compromete a los firmantes a impulsar acciones para, antes del 2020, reducir un 20% las emisiones de CO2 en sus respectivos territorios.
El grupo formaba parte del área de desarrollo territorial de la red Partenalia de autoridades locales intermedias.
La planta solar fotovoltaica de El Campello es la más extensa de FGV en la Comunidad Valenciana. FGV inauguró en octubre de 2008 esta planta que el pasado año produjo 740.000 kilovatios/ hora. La eficiencia de este sistema se ha perfeccionado este año, y en septiembre de 2010 ya se había superado toda la producción del pasado año. La planta consta de 3.600 módulos solares instalados en las cubiertas de las naves de los talleres del TRAM de El Campello. La superficie de la instalación es de 6.100 metros cuadrados. Otras instalaciones de FGV también tienen instalados sistemas fotovotaicos, por ejemplo, Valencia Sud tiene 4.900 metros cuadrados, los talleres de Naranjos tienen 3.600 y los talleres que FGV tiene en Machado tienen 3.100 metros cuadrados. Para la instalación de las placas solares de El Campello fue necesaria una inversión de 3.822.791,22 euros. Estos paneles evitan la emisión a la atmósfera de más de mil toneladas de CO2 al año y suponen un ahorro de energético de cerca de 400.000 euros anuales, lo que posibilitará a FGV recuperar la inversión en el plazo de unos diez años, siendo la vida útil de las instalaciones de 25 años.