Entrevista Roser Esteva, responsable de marketing de Carrocerías Esteva
2 de noviembre de 2010
Esteva cuenta con una nueva madera reciclada para bancos... ¿Puede contarnos más de esta novedad?
En realidad no es solo un proyecto de Esteva en solitario. Nos unimos a un grupo que estaba trabajando para extrusionar perfiles en Cataluña, compuestos un 70% de madera y un 30% polipropileno, que hasta la fecha se importaba del norte de Europa y de la China. Esteva creyó en el proyecto e incorpora los perfiles resultantes en sus productos de mobiliario urbano, lo que nos sirve para explicar todo el proyecto global de sostenibilidad.
¿Qué ventajas aporta?
El hecho de controlar el proceso de extrusionado aquí permite que todo residuo, rotura o resto sea totalmente reciclable, llegando al residuo 0. En la actualidad, trabajamos para que el 70% de la madera proceda de residuo de Cataluña, lo que tiene una elevada exigencia a nivel técnico pues el compuesto para extrusionar así lo requiere. El objetivo es minimizar los transportes y las emisiones de CO2 al mínimo hacia la sostenibilidad. Esperamos conseguirlo en el segundo trimestre de 2011.
Lo ecológico parece que está de moda... ¿Lo exigen ya los ayuntamientos a la hora de elegir sus proveedores?
No deberíamos llamarlo moda, es una tendencia obligada pues el planeta lo requiere y, a pesar de que supone mucho más esfuerzo a las empresas productoras que el ‘usar y tirar’, todos empiezan a entender que no puede haber otro camino. No es una exigencia hasta ahora porque el precio es más elevado que los no reciclables y, en el momento actual, no está el horno para bollos. Los productos sostenibles más exitosos son los que, además, son económicamente sostenibles, los que evitan costes de mantenimiento, como nuestra madera, y que son fuentes de ahorro.
¿Y en cuando a diseño, existen pre-requisitos?
Los productos reciclados tienen limitaciones técnicas puesto que dependen de una materia prima muy grosera (los residuos) que deben convertirse en productos técnicos (perfiles, moldeados, etc.). La creatividad de los diseñadores lleva a la creación de diseños a partir de las pocas opciones resultantes. La nueva línea de mobiliario urbano de Esteva se basa en los perfiles disponibles de madera reciclada hasta la fecha.
Esteva también cuenta con la fuente sostenible HO, papeleras de recogida selectiva, puntos verdes. La cuestión medioambiental ¿es una apuesta de la empresa?
Digamos que la sostenibilidad en Esteva es un valor añadido más, como lo es el diseño, la calidad o la accesibilidad. Pero la verdad es que nos dimos cuenta que ya lo llevábamos a cabo incluso sin buscarlo porque reciclar es ‘no tirar nada’ y diría que forma parte de nuestra cultura mediterránea. La formalización de esta actitud se hizo en la ultima edición de Construmat, donde expusimos con la Generalitat de Catalunya nuestros productos reciclados con la plataforma ‘Compre reciclado’, una fórmula que pretende acercar los fabricantes y compradores de productos reciclados de todos los ámbitos.
Las fuentes accesibles HO están instaladas en lugares tan dispares como La Seu d’Urgell (Lleida), Zamora o Miami.
La función de un banco es poder sentarse y la de una fuente, poder beber de ella. Pero no siempre es tan sencillo. ¿A veces prima el diseño sobre la practicidad?
En nuestro caso procuramos mantener el equilibrio sin perder la viabilidad económica, aunque no siempre es fácil. Hacer un buen diseño pero dentro del mercado. Si escapa del mercado hay que rediseñar hasta que vuelva a ser viable. Si no, se convierte en una obra de arte y no es nuestro ámbito.
Por ejemplo, ofrecemos los listones de madera reciclada para los bancos románticos ya instalados en todos los municipios para reducir su mantenimiento, pues los bancos no están inservibles, manteniendo el diseño pero siendo prácticos. De hecho, la tercera generación de Esteva, que trabaja simultáneamente con las otras dos, también presentes en la empresa, va marcando esta tendencia de ser prácticos sin abandonar la estética.
¿Qué factores en cuanto a seguridad afectan a estos productos, puesto que se instalan en la calle?
Después de 30 años instalado elementos en la calle, nuestra experiencia ya se aplica a todos los productos automáticamente. La climatología, el uso masivo... Todo hay que estudiarlo y preverlo antes de que salga al mundo un producto y, como creamos unos 10 productos nuevos cada año, hay que arriesgar para innovar.
Para terminar, ¿cuáles son las últimas tendencia en mobiliario urbano?
Parece que empieza a primar la durabilidad de los objetos más que su precio de compra, además de su reciclabilidad total. Es decir, que nunca vaya al vertedero sino que siempre esté dentro del ciclo para volver a ‘nacer’, un futuro difícil pero necesario.