España procesa 314.000 toneladas de neumáticos, un 10% más que la media de la Unión Europea

A 31 de diciembre del 2009, España despidió el año con un volumen de neumáticos fuera de uso (NFU) de 314.000 toneladas, según un informe realizado por la Asociación Europea de Fabricantes de Neumáticos y Productos de Caucho (ETRMA, en inglés). Ese dato sitúa al país un 10% por encima de sus homólogos pertenecientes a la Unión Europea. A la vez, esta cifra supone el 100% del tratamiento de neumáticos, con la consiguiente reducción del impacto medioambiental. El 70% de NFU tratado se destina a usos posteriores de reutilización o reciclaje. De este porcentaje, el 50% (153.000 toneladas) solo se recicla, el 8% se reutiliza directamente, siempre que la cubierta lo permita, y el 12% se recauchuta. El restante 30% se transforma en combustible alternativo para su utilización en cementeras. El informe arroja otras conclusiones. Por ejemplo, que el mercado español es el quinto de la Unión europea que más NFU produce anualmente, tan solo por detrás de Alemania (568.000 toneladas), Reino Unido (508.000), Italia (421.000) y Francia (369.000 toneladas). Aunque el proceso de reciclado de neumáticos al final de su vida útil puede mejorar si se amplían las utilidades del caucho, el punto de partida en España es positivo, respecto de otros países. La gestión adecuada a través de la red de plantas de recogida y tratamiento, en colaboración con los dos sistemas integrados de gestión existentes (Signus Ecovalor y TNU), evita que estos residuos acaben en vertederos. No sucede lo mismo en otros mercados como el italiano o el británico donde solo se tratan el 83% y el 95% respectivamente, del volumen generado.

“Aunque el caucho se recicla cada vez más con nuevas aplicaciones, una gran parte del mismo se emplea como combustible alternativo con fines energéticos”, asegura Alicia García-Franco, directora general de la Federación Española de la Recuperación y el Reciclaje (FER). Para la federación, miembro del Comité Organizador del Salón del Reciclado y la Recuperación, el sector ofrece un gran potencial. “Para optimizar la capacidad tecnológica de las plantas de recuperación y reciclado de NFU –añade– es necesario promover nuevos proyectos y concienciar a la sociedad de las opciones que ofrece el caucho reciclado, de forma que se consuman productos hechos con este material”. En general, el caucho es un material maleable y polivalente y su reciclado permite un gran número de utilidades. Las distintas fracciones del caucho se pueden emplear para fabricar suelos elásticos prefabricados en forma de baldosas, planchas o rollos, para pavimentos deportivos o parques infantiles.

Asimismo, las partículas de tamaño intermedio se pueden destinar a rellenar campos de césped artificial y las más finas, como aditivo para mejorar la calidad de las mezclas asfálticas y también como componente para la producción de piezas en la industria del caucho. Del caucho destacan, además, sus propiedades aislantes, térmicas y acústicas, en un segmento aún en vías de desarrollo. En síntesis, aplicaciones que facilitan una salida útil y eficiente al volumen elevado de neumáticos fuera de uso que se genera cada año. Algunos de estos avances se podrán ver en el Salón del Reciclado y la Recuperación, cuya inauguración coincidirá con la Feria Internacional del Urbanismo y del Medio Ambiente, Tecma 2010. Así, del 8 al 11 de junio, el recinto de Feria de Madrid mostrará una visión clara hacia donde se dirige la recuperación y el reciclaje de productos como los neumáticos fuera de uso.