Suelo urbano sostenible

“Colaborar con el medio ambiente desde el suelo”. Esta es la premisa que Pavimentos de Tudela ha puesto en práctica con su nuevo material, Ecogranic. Un pavimento prefabricado de hormigón con dos capas. Una capa base y una capa superficial activa, que provoca la aceleración de una reacción química llamada fotocatálisis, causante de la degradación de los contaminantes atmosféricos. Se ofrece una amplia variedad de formatos, tamaños y colores, como cualquier otro pavimento. Pero con la peculiaridad de incorporar un catalizador capaz de transformar las emisiones contaminantes de la atmósfera en productos inocuos para el medio ambiente. De esta manera, el pavimento utiliza la energía solar como fuente de activación del proceso catalítico y su efecto permanece inalterable a lo largo de su vida.

El gerente de la compañía, José Luis Moracho Amigot, explicó en una rueda de prensa celebrada en Madrid, que con esta novedad para el mercado de los pavimentos urbanos, “la empresa introduce la manera de contribuir al medio ambiente con un producto altamente ecológico por su función neutralizadora de contaminantes”. Pero también en su composición, ya que el 20% de la materia prima que lo compone procede del reciclaje de residuos de la industria y de la construcción. Una parte de estos materiales proviene de los subproductos obtenidos en el propio proceso de fabricación de la compañía. Se estima que con la reutilización de estas materias, se evita anualmente la emisión de más de 4.000 kilos de CO2 a la atmósfera.

Para reforzar la argumentación, Jesús Miguel Santamaría Ulecia, director del Laboratorio Integrado de Calidad Ambiental de la Universidad de Navarra, puso a los asistentes al corriente de la baja calidad ambiental de las ciudades hoy en día y de su evolución. Expuso los perjuicios, tanto para las personas como para las estructuras arquitectónicas, de los gases producidos por los diferentes sistemas de combustión, los óxidos de nitrógeno y otros contaminantes orgánicos volátiles peligrosos para la salud como el benceno, el óxido de carbono y el acetaldehído.

Santamaría destacó la validez del sistema de fotocatálisis como herramienta de descontaminación: la reacción química natural que involucra la absorción de luz por parte de un catalizador. De hecho, durante el proceso fotocatalítico tiene lugar una reacción de oxidación y posterior reducción de productos contaminantes orgánicos e inorgánicos, como los óxidos de nitrógeno, convirtiéndolos –tras un proceso de mineralización– en productos inocuos para la salud y positivos para las plantas.

El director del Laboratorio Integrado de Calidad Ambiental añadió que la fotocatálisis se utiliza desde hace tiempo para descontaminar el agua, quirófanos e incluso en tratamientos textiles. Por eso, su aplicación a los pavimentos es adecuada “porque es fácil de aplicar y es un proceso natural”. Una vez descompuestos los elementos contaminantes de la superficie, los restos se eliminan con la ayuda de la lluvia y del aire.

El departamento de I+D de la compañía junto al centro de investigaciones medioambientales de la universidad de Twente, en Holanda, han sido los núcleos donde se ha comprobado la efectividad del material. El trabajo parte de que los óxidos de nitrógeno son los contaminantes más perjudiciales para la salud humana: además de ser tóxicos, reaccionan con los hidrocarburos sin quemar y forman ozono, causante principal de la denominada lluvia ácida.

El estudio de campo que se realizó para verificar la valía de Ecogranic se hizo mediante la comparación con losas tradicionales. La medición se realizó durante 7 días a razón de 8 horas diarias con una toma de datos con una frecuencia de 10 segundos. Los resultados revelaron que el promedio de reducción de óxido de nitrógeno varió de una losa a otro hasta en un 56%. Los ensayos en laboratorio y los estudios de campo llevados a cabo en diferentes obras ejecutadas demostraron la eficacia descontaminante del material sin perjuicio de los resultados arquitectónicos, según Pavimentos de Tudela.

Desde luego, el cuidado del medio ambiente fue el protagonista destacado de la jornada de presentación del pavimento Ecogranic; ya que también sirvió como pretexto para que la empresa Cemex diera a conocer su cemento con sello verde, EcoOperando. Su director de calidad, José Manuel Domínguez Ruano, explicó que con este nuevo cemento el ahorro de emisiones de CO2 es de un 35%, debido a que en los hornos utilizan como materias primas combustibles alternativos y las adiciones para acondicionar el cemento se realizan con materiales naturales.

La nota artística de la jornada vino de la mano del arquitecto Carlos Ferrater i Lambarri, catedrático de Proyectos Arquitectónicos de la Universitat Politècnica de Catalunya, que aportó una amplia visión del valor y las opciones de los materiales en cualquier obra arquitectónica. Con una disertación gráfica sobre la evolución de la materialidad en las construcciones, valoró positivamente la innovación de los pavimentos en una línea sostenible y a la vez estética.

El vídeo que proyectaron en la presentación de Ecogranic a los profesionales del sector destacó por un ejemplo gráfico sobre las posibilidades del material. Aseguraba que si pavimentaran con Ecogranic la superficie equivalente a un campo de fútbol se eliminaría la contaminación que producen 400 vehículos en un año. Un dato que, además de llamar la atención de los presentes, pretendía concienciar sobre las ventajas medioambientales que una ciudad puede llegar a tener si estuviera en gran parte pavimentada con este material.

De hecho, de la implicación de la empresa dejó constancia su gerente: “desde ahora sólo vamos a fabricar Ecogranic. No tiene sentido seguir fabricando materiales tradicionales si estamos convencidos de que funciona, es eficaz y no encarece apenas los costes”. Y ello pese a que el incremento del precio podría incrementarse en un 10%. Además de esta aclaración, en el turno de preguntas Moracho explicó que la máxima eficacia descontaminante coincide con las baldosas y losas de colores claros, porque la reacción fotocatalítica de los rayos del sol se produce en este tipo de tonalidades. Al hilo, surgió la cuestión del envejecimiento de las losas. “Al repeler la suciedad duran incluso más que las tradicionales por el efecto descontaminante que no desparece nunca de la superficie”, aclaró.